Así será la negociación colectiva que viene
No habrá más esperas. Después de que patronal y sindicatos oficializaran el jueves el fracaso del diálogo social sobre la reforma de los convenios, el Gobierno aprobará el 10 de junio una reforma de la negociación colectiva con llamativas novedades en materia de flexibilidad y ultraactividad.
El Ministerio de Trabajo ha presentado hoy al Consejo de Ministros un documento con las grandes líneas de la reforma, que busca "mantener el necesario equilibrio entre las necesidades de las empresas y los derechos de los trabajadores".
Si hay un término que puede definir la negocación colectiva que viene es flexibilidad. Así, Trabajo habla de reforzar la negociación en la empresa, ampliando las materias que pueden tratarse en ese ámbito y otorgándole prioridad aplicativa respecto del convenio sectorial.
En román paladino: cuando la dirección y los trabajadores de una empresa se pongan de acuerdo, lo decidido en el seno de esta se impondrá a lo que se acuerde en el sector o en la zona geográfica a la que corresponda esta.
La reforma dará fin, además, a las "situaciones no deseadas de ultraactividad" en los convenios, introduciendo la figura de la mediación o el arbitraje para solucionar los bloqueos cuando finalice la vigencia pactada del texto original.
Trabajo pretende además ordenar la estructura negociadora desde la perspectiva del sector, reconociendo la distinta realidad socioeconómica de los sectores productivos y los territorios, siempre supeditada al libre acuerdo dentro de la empresa.
El Gobierno reconoce la necesidad de mejorar, modernizar y actualizar un sistema de negociación colectiva cuya regulación data de tres décadas atrás.