La CNMV velará por que el minoritario no salga perjudicado en las OPV de las cajas
Bankia está echando el resto para que su salida a Bolsa triunfe en la red comercial. Pero la CNMV exigirá que las cajas también hilen muy fino en el tramo institucional. Este deberá representar al menos el 40% de la colocación y estará distribuido entre un mínimo de 200 inversores, para que ninguno tenga poder suficiente de fijación de precios. El supervisor quiere que las OPV sean competitivas.
Que pensaría usted de una OPV en la que muchos institucionales participan en la colocación, imaginemos que unos 30, que unos 100 fondos compran la emisión y que al cabo de dos meses nos encontramos con que los títulos han sido vendidos a los clientes de la entidad emisora?". Con este ejemplo, ilustraba ayer el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, lo que justo desea que no pase en las salidas a Bolsa de las cajas de ahorros.
La CNMV apoya que las cajas salgan a cotizar, pero no quiere que la operación se haga de cualquier manera. El mensaje de la comisión es que se exigirá que la valoración de las entidades "se haga con competitividad y a precios reales". Lo que seguramente implicará que las cajas tendrán que ofrecer descuentos importantes en su colocación.
Segura acudió a la comisión de Economía del Congreso para presentar el informe anual de la entidad. Allí fue interpelado por el representante del PP Jaime García Legaz, sobre el proceso de salida a Bolsa de las cajas y las garantías de la protección al minorista en la colocación. El portavoz popular propuso que el 100% de la colocación de las cajas se hiciera inicialmente a institucionales y que los pequeños inversores solo pudieran entrar una vez que se hubiera comprobado la correcta formación de precios. "Eso es lo que haría que el proceso fuera más limpio", señaló Legaz en declaraciones a este periódico.
En su respuesta al diputado, Segura afirmó que el problema de las cajas no es de transparencia, sino de "valoración y formación de precios". El presidente de la CNMV expuso cuál será la prioridad: "El hincapié tenemos que hacerlo en que haya un tramo muy importante de inversores institucionales y sin acuerdos significativos entre ellos" para evitar precios fuera de mercado que terminen perjudicando a los minoristas. Ese tramo importante de institucionales se concreta en, al menos, un 40% de la oferta; en números redondos, un mínimo de 200 inversores especializados, para evitar que uno de ellos tenga poder de fijación de precios y que "tendrán que competir entre ellos". Eso sí, en Enel Green Power, la OPV estaba destinada inicialmente en un 85% a institucionales y luego se redistribuyeron los tramos, de forma que los especializados fueron solo el 22%.
Segura reconoció que los procesos actuales de salida a Bolsa de las cajas están siendo "mucho más cortos de lo habitual". Pero la CNMV no tiene prisas. "Solo saldrán a cotizar si publican toda la información requerida". El supervisor recordó además a las entidades deberán colocar al menos un 25% de su capital, aunque la ley da margen al supervisor para aceptar un volumen inferior, que en todo caso no bajará del 20%. Por otra parte, Segura subrayó que el mercado "no valoraría bien" que los consejos de las cajas excedan las recomendaciones de buen gobierno: un máximo de 15 consejeros y un tercio de ellos, independiente.