Los trabajadores de Clesa y Royne exigen que se active "urgentemente" el concurso de acreedores
Alrededor de medio centenar de trabajadores de Clesa y Royne se han concentrado este viernes a las puertas de la sede de los juzgados centrales de lo contencioso-administrativo de Madrid para exigir que se active "urgentemente" el concurso de acreedores de ambas compañías, propiedad de la familia Ruiz Mateos.
En declaraciones, el portavoz del comité de empresa de Clesa, Luis Muñoz, ha reclamado que el juez asignado para gestionar el caso "estime el concurso lo más urgentemente posible", debido a la situación por la que están atravesando los trabajadores de la compañía.
Así, ha añadido que llevan cinco meses "en una situación de calvario" y que, tras este tiempo, la plantilla "no ve la salida al final del túnel". "Esta situación no se puede seguir sosteniendo, hay decenas de compañeros que han perdido alojamiento por no poder pagar el alquiler, y muchas familias que están comiendo con ayuda de familiares y amigos", ha denunciado.
En esta línea, ha pedido a las autoridades, como han hecho con Lorca tras el terremoto, "una solución rápida" para hacer frente al problema, y ha criticado que de las 15 empresas que integran el grupo estén siendo los últimos "a los que se ha activado el proceso concursal".
Por su parte, el presidente del comité de empresa de Helados Royne, Casimiro Rodríguez Costa, ha agregado que de establecerse este proceso la empresa "saldría a flote", ya que son varias las compañías que se han mostrado partidarias a comprarla.
Finalmente, ha hecho mención a las dificultades por las que atraviesa esta empresa, con un 70% aproximadamente de clientes perdidos, teniendo en cuenta que vive "de una campaña específica entre febrero y septiembre". "Si no se activa el auto del juez nos queda de vida entre dos y tres semanas", ha lamentado Rodríguez, quien ha añadido que la planta de Leganés (Madrid) está funcionando al 10% de su capacidad, algo que según ha insistido "repercute en todas las delegaciones de España".