La prima de riesgo cede a la presión de Grecia y se aproxima a los 230 puntos
El diferencial de la deuda soberana española frente a la referencia alemana ha subido más de 10 puntos en dos días. La inquietud sobre la reestructuración de la deuda griega y cierto recelo por la deuda autonómica ante las elecciones han elevado la presión.
La resistencia al contagio que había mostrado la deuda española en las últimas semanas frente a la creciente preocupación por la economía griega comienza a mostrar algunas fisuras. La prima de riesgo española se encareció ayer por segundo día consecutivo hasta las proximidades de los 230 puntos básicos, un nivel que había conseguido abandonar hace tres semanas. Y en paralelo al avance de la prima de riesgo, aumentó también la rentabilidad del bono español -que se mueve a la inversa del precio- y que ayer alcanzó el 5,35%.
Esta renovada presión es el escenario que se encontrará el Tesoro en la subasta de obligaciones a 10 y 30 años que realizará hoy y en la que espera colocar entre 3.000 y 4.000 millones de euros. La anterior subasta de títulos a diez años tuvo lugar el pasado 20 de abril y entonces el Tesoro adjudicó 2.652,42 millones de euros a un interés marginal del 5,483%, el más elevado desde enero y superior a la rentabilidad que se pedía ayer en el mercado secundario.
Fuentes de mercado apuntan al debate sobre la renegociación de la deuda griega como uno de los factores que pesan sobre la prima de riesgo española que, en cualquier caso, está en niveles muy inferiores a los máximos del pasado noviembre, de 283 puntos básicos. "Nos acercamos a algún tipo de reestructuración de la deuda griega y esto se traduce en un mayor contagio sobre la deuda periférica", señalan desde un banco de negocios extranjero.
Grecia sigue en el ojo del huracán de los mercados y el BCE intentó ayer enfriar la posibilidad de una renegociación de la deuda helena, a pesar de que el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Junker, sugiriera la víspera una "reestructuración suave".
El vicepresidente del BCE, Victor Constancio, advirtió ayer que tal decisión no solo tendría graves consecuencias para el país sino que tendría un efecto contagio en el resto de la eurozona, un mensaje que los mercados se encargaron de anticipar. Así, junto al avance de la prima de riesgo española, Portugal acusó las dudas de los inversores en la subasta que realizó ayer, en la que ofreció el 4,657% por letras a doce meses.
Incertidumbre política
Sobre el mercado también planea cierta inquietud ante las elecciones municipales y autonómicas que celebra España el próximo domingo. El déficit de las comunidades autónomas es uno de los puntos débiles de la economía española y entre algunos inversores existe el temor a que un cambio de signo político tenga como consecuencia el anuncio de una deuda autonómica superior a lo previsto o de modificaciones en los compromisos de recortes.
El Ibex recupera los 10.300 y sube el 0,36%
El Ibex se tomó ayer un respiro y apuró un alza del 0,36%, hasta los 10.343,70 puntos, después de haber retrocedido en la sesión de la víspera a los niveles del mes de marzo. Su avance fue el más moderado entre el resto de plazas europeas, inferior al alza del 1,07% del FTSE; del 0,92% del Cac; el 0,65% del Dax o el 0,62% del Euro Stoxx. Las ganancias en Europa estuvieron apuntaladas por el tono moderadamente positivo de Wall Street, que cerró con alzas del 1,14% en el Nasdaq; del 0,65% en el Dow Jones y del 0,88% en el S&P.La Bolsa se desmarcó de las presiones que sufre la deuda soberana y, junto a Wall Street, encontró en las materias primas alimento para las subidas, con alzas del 3% en el petróleo y del 4% en la plata. En el Ibex, el avance estuvo determinado por Santander y BBVA, que aportaron 23,8 puntos de los 37,3 del alza del índice. El mejor valor fue Gamesa, con una subida del 2,45% frente a la caída del 2,12% de Bankinter.