Lavinia cierra su tienda de Barcelona por problemas con el alquiler del local
Lavinia cierra su tienda de Barcelona. El primero de junio, cuando se cumple una década, echará el cierre al local de la Avenida Diagonal 605, ante la imposibilidad de dar continuidad a su contrato de alquiler en este local. Las razones no son otras que, según relató a este diario una fuente de la compañía, que la falta de un trámite burocrático para ampliar el negocio, hasta ahora destinado a la venta de vinos y destilados, a un espacio gastronómico, tal y como sucede en las tiendas de Madrid y de París.
Para reconvertir la tienda en un espacio en que se pueda además degustar vinos y bocados gastronómicos, Lavinia necesitaba adaptar el local a los requerimientos municipales, tal como disponer de una salida de humos y los permisos pertinentes para desarrollar esta actividad.
La propiedad de Lavinia, empresa de capital español con nueve locales en distintos países, ha estado buscando otros locales donde aplicar su modelo de negocio. Al final, la búsqueda ha resultado infructuosa. La empresa mantendrá en Barcelona a un equipo comercial que seguirá atendiendo a los clientes de restauración y la venta online. "Barcelona es un eje importante y valoramos nuevas oportunidades de desarrollo en esta ciudad", dice Andrés Ardid, director general de Lavinia.