El presidente del Ifo abre la veda: Grecia debe salir del euro
El presidente del instituto alemán de estudios económicos Ifo, Hans-Werner Sinn, se ha mostrado favorable a que Grecia abandone la eurozona y recupera su antigua moneda, el dracma, para superar su crisis financiera y presupuestaria.
Ese paso "sería el mal menor" en las actuales circunstancias, afirma Sinn en declaraciones al dominical Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung, recogidas por Efe, en las que subraya que la recuperación del dracma permitiría a Grecia devaluar su moneda y, a largo plazo, conseguir que su economía vuelva a ser mas competitiva.
A su juicio, la economía griega se encuentra en situación tan precaria porque no consigue vender sus pocos productos de exportación en la fuerte divisa que es el euro.
El retorno al dracma haría que los productos griegos se abaratasen, se vendiesen mejor y permitiesen al estado griego la posibilidad de ingresar más impuestos y saldar sus deudas.
Sinn reconoce que, pese a ese posible paso, Grecia continuaría teniendo graves problemas financieros, ya que su endeudamiento se cifra en euros y el dracma le permitiría reducir su carga muy lentamente.
Por ello considera indispensable que "se condone en parte la deuda exterior de Grecia" y se muestra convencido de que el retorno al dracma ayudaría a las empresas griegas a recuperarse y volver a flote.
Igualmente subraya que si se trata de resolver el problema de la crisis griega únicamente por la vía del ahorro, las empresas griegas lo tendrán sumamente complicado para subsistir, ya que todos los precios en ese país bajan debido a lo que se llama "devaluación interna".
Sinn compara la situación de Grecia con la de la política deflacionista del canciller alemán Heinrich Brünnig al final de la República de Weimar a principios de la década de los años 30 del siglo pasado, que tuvo consecuencias fatales.
En el mismo rotativo, Clemens Fuest, director del Consejo Asesor del ministerio federal alemán de Finanzas, subraya que la salida de Grecia de la eurozona y su retorno al dracma "es realizable", aunque considera que este no es el momento adecuado.
"En un primer paso se debe resolver el problema del sobreendeudamiento con un corte de la deuda en el seno de la eurozona. En un segundo paso se puede reflexionar acerca de si Grecia desea permanecer en la eurozona", reflexiona Fuest.
El diputado y experto en Finanzas del gubernamental Partido Liberal alemán Frank Schäffler, comparte los planteamientos de Fuest, que califica de Plan B.
"Necesitamos ahora un plan para reestructurar la deuda de Grecia, pero a la vez necesitamos un escenario para posibilitar que Grecia abandone el euro", señala Schäffler.
El político liberal subraya que deben ser los propios griegos quienes decidan si desean que su país abandone el euro, pero el resto de los países de la eurozona deberían "acompañar con benevolencia" ese proceso.