El grupo español Puig se queda con el 45% de Jean Paul Gaultier en poder de Hermès
El grupo francés Hermès reconoció ayer haber llegado a un acuerdo con la empresa española Puig por el que cede su 45% en la empresa de moda Jean Paul Gaultier. "En el marco del deseo de Jean Paul Gaultier de acelerar el despliegue de su casa y darle un nuevo impulso, Hermès vendió ayer, en pleno acuerdo con el creador, todos los títulos de su participación", explicó la multinacional en un comunicado.
El precio de venta de las acciones, 16 millones de euros, junto con la devolución de los préstamos concedidos, otros 14 millones de euros, "generará un beneficio contable para la sociedad de 30 millones de euros", aseguró Hermès.
Patrick Thomas, director ejecutivo de Hermès declaró ayer, "estoy encantado con este movimiento de una casa que está muy unida a nuestro corazón. Estoy convencido de que la alianza entre Jean Paul Gaultier y la familia Puig llevará a la casa a nuevos máximos". Desde hace días Puig mantenía negociaciones exclusivas para hacerse con el control de la firma de moda francesa, según fuentes cercanas a la operación.
Puig es el fabricante de marcas de perfumes para casas de moda como Prada y Commes des Garçons y es el propietario de enseñas como Carolina Herrera, Nina Ricci y Paco Rabanne. Puig ha competido por hacerse con Jean Paul Gaultier con el grupo chino Fung Capital, que acudió a la oferta asociado con la compañía nipona Shiseido.
La operación de venta arrancó el mes pasado cuanto el grupo Hermès reconoció que estaba en conversaciones para vender su 45% de Gaultier. Las negociaciones se centran en la actualidad en la valoración que el diseñador francés establecerá para su 55% y en la forma en la que el grupo Puig hará efectiva la toma de control de la compañía. Algunas fuentes del sector aseguraban ayer que Puig ha tomado también un 15% adicional del propio Gaultier, es decir, un total del 60%
El diseñador francés busca fondos para desarrollarse en los mercados asiáticos y vender un negocio que podría alcanzar una valoración global de 200 millones de euros.