Bañuelos construye un imperio agrícola en Brasil
Enrique Bañuelos cambia de colores. Desde un mundo blanco y gris del cemento en España, el inversor está construyendo un imperio verde. Su principal empresa brasileña del sector agrícola, Brasil Ecodiesel, ha firmado en los últimos meses contratos de fusión con dos de las mayores empresas del sector en el país sudamericano. La última operación fue ayer, con la adquisición de la productora agrícola Vanguarda. Ahora, el empresario valenciano participa en un holding que tiene 330.000 hectáreas y ya es el mayor dueño de tierras plantadas en Brasil.
Según un hecho relevante enviado durante esta madrugada por Brasil Ecodiesel a la Comisión de Valores Mobiliarios de Brasil, el negocio con el Grupo Vanguarda está valorado en 1.200 millones de reales (alrededor de 530 millones de euros). Según un comunicado oficial de Brasil Ecodiesel y Vanguarda, la nueva compañía tiene un valor de mercado de 2.160 millones de reales (950 millones de euros).
Con la operación, la empresa de Bañuelos pasará a controlar una empresa que tiene 230.000 hectáreas en la región con fuerte actividad agrícola de los Estados de Mato Grosso y Bahia. La empresa fusionada, fundada por la familia Pivetta, tiene fuerte presencia en el sector de la soja, pero también trabaja con maíz, algodón, ganado, cerdos y producción de aceite.
Antes del Grupo Vanguarda, Bañuelos cerró otra importante operación en mayo de 2010 cuando tomó el control del Grupo Maeda. Este grupo un tradicional productor agrícola de una familia de origen japonés y que trabaja desde hace más de 80 años en Brasil.
El ojo de Enrique Bañuelos está en el potencial de Brasil en el mercado agrícola. Actualmente, el país es uno de los principales productores del mundo. Y en los últimos años, con la subida de los precios de las commodities, las exportaciones se vieron fuertemente favorecidas. Una de las mayores demandas de alimentos es generada por los propios mercados emergentes, como China y la India.
Con Maeda y Vanguarda, el inversor valenciano controla 3.300 kilómetros cuadrados plantados -la comunidad autónoma de La Rioja tiene 5.000 kilómetros cuadrados-. El según mayor productor agrícola brasileño, SLC Agrícola, tiene 2.300 kilómetros cuadrados.
Con las dos adquisiciones, Brasil Ecodiesel ha cambiado completamente su actividad. Cuando fue comprada por el empresario español, la compañía era casi exclusivamente del sector de biocombustibles y producía biodiesel. Sin embargo, tras la compra de Maeda y ahora de Vanguarda la empresa de Bañuelos amplía su rango de actuación y su actividad pasa a ser principalmente la producción y procesamiento agrícola, en especial de soja y algodón.
Todas las compras hechas por Bañuelos se hacen através de un complejo cuadro societario. Originalmente, las inversiones han sido acometidas por la empresa Veremonte, con sede en Londres y una oficina en el 6º piso de un elegante edificio en la Avenida Brigadeiro Faria Lima, en la zona más exclusiva de Sao Paulo.
Veremonte, a su vez, controla una empresa brasileña de inversión llamada Arion Capital que, curiosamente, tiene sede en el mismo edificio elegante, pero un poco más arriba: en el 17º piso. De esta oficina salieron los contratos de compra de Brasil Ecodiesel, Maeda y Vanguarda.