Guerra comercial por los tanques de Arabia Saudí
Los planes de Arabia Saudí para renovar sus carros de combate han desatado una guerra comercial y diplomática entre los países que aspiran a hacerse con un jugoso contrato. Entre ellos, España, Francia y Estados Unidos.
El Gobierno español ha sido uno de los más activos en este sentido. En noviembre del año pasado, el Ejecutivo aprovechó una visita a España del ministro adjunto de Defensa, Khaled bin Sultan, para ofertar los Leopard, el tanque estrella del Ejército de Tierra. En aquel momento, casi se dio por hecho un acuerdo para la venta de 250 blindados, en lo que sería la operación armamentística más importante protagonizada por España, de unos 3.000 millones de euros.
Sin embargo, el asunto no es tan sencillo. "El tema está todavía muy en sus inicios. Aún se está definiendo el programa industrial, el proyecto que se puede presentar, el carro concreto que se va a ofertar...", advierten en fuentes de la industria de defensa española.
De hecho, el optimismo trasladado a la opinión pública a finales del año pasado no sentó nada bien en el Ministerio de Defensa, encargado de pilotar el proceso, que ha dado orden a todos los implicados en las negociaciones de aplicar una política de 'apagón informativo' sobre el posible contrato.
Aunque despacio, los contactos se mantienen. Hace menos de un mes, una delegación española visitó Arabia Saudí para impulsar las conversaciones. "Hay avances pero es un tema muy complejo. La crisis en los países árabes despertó cierta inquietud sobre el futuro de un posible contrato pero parece que ya se han despejado las incertidumbres. En todo caso, se trata de un tema que nunca ha estado paralizado", apuntan otras fuentes del sector.
Uno de los obstáculos que tendrá que solventar el Gobierno español será el de la competencia internacional. Los propios saudíes ya han advertido que hay "otros países" interesados en hacerse con el contrato.
Interés exterior
Y es que el reino no depende de un único proveedor. Sus carros de combate, en la actualidad, proceden de Estados Unidos (M1A2 Abrams, sobre todo) y Francia (AMX-30), países muy interesados en participar en un nuevo contrato. Sobre todo en el caso galo, ya que existe mucho interés por vender el Leclerc, un tanque que solo tiene un cliente de exportación (Emiratos Árabes).
De hecho, la actividad reciente de Nexter (el fabricante del Leclerc) en Oriente Próximo se ha intensificado, con varios contratos para venta de munición firmados en los últimos tres meses, así como un acuerdo para proporcionar equipamiento adicional para los carros de combate que operan los Emiratos Árabes.
Un 'sudoku' para encajar más de 50 empresas
Uno de los aspectos que España tiene pendiente de cerrar con vistas a la posible venta de carros a Arabia Saudí es el reparto de tareas entre las empresas, españolas y extranjeras, que vayan a participar en el proyecto.Una de las posibilidades que se baraja es que el contratista principal sea una joint venture que se crearía al efecto entre Santa Bárbara e Indra. No obstante, todavía no hay nada acordado. "El contrato podría suponer la participación de casi 50 o 60 empresas, de España y de fuera", explican en fuentes de la industria.El propio acuerdo que se firmó en diciembre de 1998 para la compra, por parte de España, de 223 tanques Leopard y 16 carros de recuperación ya contó con múltiples protagonistas, principales candidatos a repetir en un nuevo contrato.Así, como contratistas principales participaron Santa Bárbara (el sistema completo), Navantia (el motor), SAPA (la transmisión) o Indra y Amper (sistema de combate). Del exterior, tomaron parte empresas propietarias de distintas patentes y responsables de la transferencia tecnológica correspondiente. Así, hubo que contar con las alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KWM), Rheinmetall, MTU, Renk o STN Atlas (ahora de Rheinmetall), entre otras sociedades.
Un acuerdo multimillonario
- Arabia Saudí quiere ampliar, con nuevas unidades, el número de tanques con los que cuenta su Ejército.- El país, que en 2009 gastó más de 29.000 millones de euros en armamento, baraja comprar unos 250 blindados. El contrato podría rondar los 3.000 millones.- España ofrece una versión de los Leopard, en competencia con los Leclerc de Francia. EE UU también aspira a un posible contrato.