La rentabilidad en Renfe es el reto y también la exigencia
Las mercancías se convierten en la prioridad de la operadora, junto a los servicios de alta velocidad y en convivencia con las cercanías
El presidente de Renfe, Teófilo Serrano, llegó hace dos años a la operadora con un decálogo debajo del brazo. El primer mandamiento advertía que, por convencimiento y también por exigencia de la UE, suprimiría aquellos servicios ferroviarios de viajeros que no fueran rentables. El déficit solo se consentiría en los trenes que encajaran en el catálogo del servicio público y fueran subvencionados por el Estado o las comunidades autónomas.
La compañía apuesta por incorporar sistemas de venta similares a los de las aerolíneas
Cuando no ha cumplido 24 meses en el cargo, Serrano se ha dado el gusto de comunicar que, por primera vez en su historia, Renfe consiguió en 2010 números negros de 2,5 millones en los servicios de viajeros de AVE y larga distancia. Clave en este hito: que todas las líneas del tren veloz están en beneficio y compensan las pérdidas de las relaciones del tráfico convencional. La contención del gasto es la otra referencia en un ejercicio de crisis en el que el número de pasajeros de este segmento cayó a 22,2 millones. El segundo mandamiento del decálogo de Serrano aspiraba a convertir Renfe en "un operador logístico integral", con el fin de que el negocio de mercancías "alcance un Ebitda de al menos un 5% sobre ventas". De modo consecuente, la empresa ha lanzado un proyecto de semiprivatización de su negocio de carga, por el que traspasará a cinco sociedades anónimas de nueva creación buena parte de sus activos. Desde los 1.650 empleados, a la flota especializada de vagones, pasando por los contratos de transporte en vigor, así como aquellos que negocia. La actividad de las sociedades responderá a los cuatro negocios de grandes mercancías en los que el tren está especializado: transporte intermodal, productos siderúrgicos, coches nuevos, multiproducto y graneles. La quinta sociedad estará centrada en la prestación de servicios logísticos tales como estiba y remolque, entre otros.