El Gobierno dibuja un escenario con menos crecimiento y más paro
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, ha reconocido esta tarde que la revisión a la baja de las previsiones de crecimiento para 2012 y 2013 tendrá incidencia en el techo de gasto del próximo año porque "el objetivo de déficit es irrenunciable". El Ejecutivo ha mantenido la tasa de crecimiento en 1,3% para este año pero ha elevado cinco décimas, hasta el 19,8%, la tasa de desempleo.
Salgado destacó que la mejoría del sector exterior compensará este año los peores datos previstos para el consumo privado, aunque asumió que el pronóstico de los dos ejercicios siguientes se dejará notar en el techo de gasto, el documento presentado en junio que sirve de base para el posterior proyecto de presupuestos generales del Estado. No obstante, la vicepresidenta sugirió que la reducción de gasto o la subida de impuestos que compensen el menor crecimiento previsto serán de entidad moderada, porque "el grueso del ajuste de déficit se realizará este año".
La también ministra de Economía ha presentado el primer cuadro macroeconómico del año, orientado a armonizar las cuentas con la comisión europea, en el que se mantiene en el 1,3% la previsión de crecimiento del PIB para este año. Sin embargo, la subida del precio del petróleo y el previsible aumento de los tipos de interés han llevado al Ejecutivo a recortar en dos y tres décimas su pronóstico para los siguientes ejercicios (2,3% en 2012, y 2,4% en 2013).
Economía asume que esa revisión implica una peor previsión de paro. De esta forma, el Ejecutivo ha revisado al alza la tasa de desempleo prevista para este año en cinco décimas, desde el 19,3% al 19,8% y ha modificado las previsiones para 2012, situándola en el 18,5% desde la anterior previsión del 17,5%. Salgado ha reconocido que la tasa no bajará del 16% hasta 2014. Así, el nivel de desempleo duplicará el registrado en 2007 al menos tres años más, lo que sugiere que la crisis financiera global puede suponer más de una década perdida para el mercado laboral español.
Ante las dudas sobre el 1,3% de avance de PIB previsto para 2011, Salgado recordó que el Gobierno ha sido más preciso que la mayoría de los analistas a la hora de realizar sus previsiones de crecimiento para los dos últimos años. "Los datos de los que disponemos respecto al primer trimestre son perfectamente compatibles con nuestro pronóstico", remachó. Dentro de un cuadro macro que supone un panorama global a la baja, la única buena noticia es un ajuste del sector exterior, que se produciría más rápido de lo previsto, hasta el situar la necesidad de financiación en el 2% del PIB en 2014.