Ayudas públicas, sin descartar un 'banco malo'
La entidad se mantiene fiel a la solución catalana, partidaria de evitar la unión con cajas de otras regiones. Acudirá al FROB para conseguir los 1.718 millones que necesita de capital, si bien aún no ha decidido si se acogerá al primer sistema de ayudas públicas para el que tiene luz verde, y que supone un préstamo a un interés determinado, o al segundo, que implica la toma del Estado de parte del capital. Será de forma temporal porque la caja prevé buscar inversores privados que releven al FROB. Catalunya Caixa creará un banco para traspasar su actividad financiera y no descarta constituir "posibles estructuras que faciliten la segregación de los activos inmobiliarios", es decir, un banco malo. Esta alternativa, de momento, solo la ha puesto en marcha La Caixa. Entre las fórmulas para captar fondos prevé la entrada de los empleados en el capital o la emisión entre clientes de deuda convertible en acciones, aunque a corto plazo descarta salir a Bolsa.