Alierta sube la apuesta en Brasil
César Alierta ha vuelto a dejar claro ayer que Brasil es un mercado clave para Telefónica. El máximo responsable de la operadora se reunió este miércoles con Dilma Rousseff, la nueva presidenta del país, lo que le ha convertido en uno de los primeros presidentes de grandes compañías con presencia en Brasil en reunirse con la sucesora de Lula da Silva.
En el encuentro, Alierta confirmó a Rousseff el compromiso a largo plazo que Telefónica tiene con el país. Así, el directivo explicó que la operadora va a invertir más de 24.300 millones de reales (unos 10.382 millones de euros) en Brasil entre 2011 y 2014. Una cifra que es un 52% superior a las inversiones realizadas en el país durante el periodo entre 2007 y 2011. Alierta recordó que desde 1998, Telefónica ha invertido en torno a 24.300 millones de euros. Y todo con grandes operaciones corporativas desde la entrada en la CRT de Río Grande do Sul y la participación en la privatización de Telebras (tomó el control de Telesp), pasando por la compra en 2010 de la participación de Portugal Telecom en Vivo, el gigante local de los móviles.
Esta ya larga trayectoria ha convertido a Brasil en uno de los pilares centrales del negocio de Telefónica. Los números son abrumadores. En las cuentas de 2008, Latinoamérica supuso el 43% de los ingresos de la operadora y, a su vez, Brasil aportó el 42% de la facturación en la región. En total, los ingresos en el país superaron los 11.119 millones de euros, el 18% del total de Telefónica.
De cara al futuro, el peso de Brasil en los resultados de la compañía va a aumentar. En la última call conference con inversores, Alierta insistió en la apuesta de la compañía por Latinoamérica, especialmente por Brasil. Y defendió las inversiones que se van a hacer en nuevas infraestructuras como vía clara para ganar presencia en negocios de crecimiento tanto en la banda ancha fija como móvil, actividad esta última donde mantiene una dura competencia con la mexicana América Móvil.
Pero, además, Alierta comunicó a Rousseff que van a comenzar las actividades, en São Paulo, del primer centro de innovación de Telefónica fuera de España. Otra prueba de la relación, cada vez más profunda, que hay entre ambas partes.
En 2014 y 2016, Brasil se juega su imagen ante el mundo en las celebraciones del Mundial de fútbol y de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La calidad de sus infraestructuras tiene una gran relevancia de ese paisaje. Y para que todo funcione, el papel de Telefónica es fundamental. El mensaje de Alierta a Rousseff es que la empresa cumplirá su compromiso.