IAG impulsa el negocio de Iberia con la compra de 16 Airbus de dos motores

Iberia ha esperado a sellar su fusión con British para tomar una decisión pendiente muy trascendente. Comprará a Airbus, por 2.500 millones, 16 aviones de largo radio de dos motores, con lo que ahorrará un 15% de combustible.

La decisión se esperaba hace ya un par de años, pero las negociaciones para la fusión con British la han demorado. Por ello, una vez que la autoridad de IAG es un hecho, sus máximos responsables, Antonio Vázquez y Willie Walsh, se han apresurado a dar luz verde a la renovación de la mitad de la flota de largo radio de Iberia.

Tal como se esperaba, el aparato elegido es el modelo de Airbus de dos motores A-330. El grupo aéreo comprará en firme ocho aparatos y se reserva ocho opciones. A precio de catálogo la operación puede ascender a 2.500 millones de euros, aunque Iberia siempre ha negociado a la baja sus compras al constructor europeo; no en balde los 150 aparatos de su flota son de esta firma.

La autonomía de los aparatos que tiene en cartera les otorga un alcance sin escalas de hasta 5.600 millas náuticas (10.400 km). La aerolínea elegirá entre tres fabricantes -General Electric, Pratt and Whitney o Rolls-Royce- el suministro de los dos motores.

La cabina de los nuevos aparatos estará distribuida en dos clases: business plus, a la que se reservarán 36 asientos en la parte delantera, y la clase turista, con 241 plazas. La flota prestará servicio entre Madrid-Barajas y los principales aeropuertos de América del Norte, Caribe, parte de Sudamérica y África.

La compañía que preside Antonio Vázquez había demorado la renovación de su flota de vuelos transoceánicos. Hasta la fecha está compuesta por 35 aparatos de Airbus del modelo 340, cuya característica principal es la propulsión por cuatro grandes motores.

Aunque esta flota ha venido actualizándose mediante operaciones de leasing que incluyen sustituciones cada cierto tiempo, Iberia había detectado que, a largo plazo, la utilización de aparatos cuatrimotores implicaba unos costes menos eficientes, en rutas similares, que los que ofrecen sus principales competidoras que utilizan bimotores. Con la decisión de incorporar a finales de 2012 esta nueva flota, la aerolínea reducirá su consumo de queroseno un 15%.

Iberia ha explicado en una nota que los costes de operación de la nueva flota tampoco tendrán penalización por las necesidades de formación de las tripulaciones y los costes de mantenimiento, gracias a su similitud con el parque de aviones actual.

Willie Walsh, ejerciendo por primera vez de consejero delegado de IAG, dijo ayer que "el A330 es un excelente avión, tanto en términos de confort como de prestaciones operacionales, lo que nos proporcionará un beneficio considerable en costes debido a su menor consumo de combustible y su comunalidad con la existente flota de aviones de largo alcance de Iberia".

La compañía española tiene previsto crecer más de un 10% en sus operaciones de largo radio durante este año.

A la espera de la nueva generación

Desde hace ya varios años se sabe que la etapa en la que las compañías aéreas podrán comenzar a servirse de las ventajas de la nueva generación de aviones de largo radio, el Boeing 787 y el Airbus 350, todavía tardará en llegar.Como casi todas las actividades económicas, la construcción de grandes aeronaves comerciales también ha sufrido su particular burbuja. Hace ya cinco años, tanto Boeing como Airbus, dieron por amortizados sus aviones de este rango, el 767 y el 777 de la compañía estadounidense, y el 340 y 330 del constructor europeo, y se pusieron a comercializar como "poseídos" las aeronaves de la siguiente generación cuyo fuselaje estaba realizado en materiales compuestos en más de un 50% de su superficie, sus formas eran más aerodinámicas, su navegación más eficiente.La realidad ha venido a poner las cosas en su sitio. Practicar una revolución aeronáutica como la que se prometía era fácil para las divisiones de marketing, pero mucho más complicada para los ingenieros y las plantas de fabricación. Hoy, B-787 y A-350 se esfuerzan por convertirse en lo que hace años prometieron. Mientras, los aviones viejos, como el Airbus 330, siguen dando excelentes resultados.