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Caufec forma parte del grupo de la familia Sanahuja

Una filial de Sacresa entra en concurso con 180 millones en deudas

Un juzgado de Barcelona ha decretado el concurso de acreedores de Caufec, filial de Sacresa, que suma pasivos por 180 millones. La mayor parte del grupo de empresas de los Sanahuja entró en concurso en junio pasado.

Caufec, sociedad inmobiliaria del grupo Sacresa, propiedad de la familia Sanahuja, ha entrado en concurso de acreedores con deudas por 180 millones de euros. El concurso ha sido decretado por el juzgado mercantil número dos de Barcelona.

La sociedad tiene como principal actividad el desarrollo de dos grandes proyectos inmobiliarios en Barcelona: Finestrelles (Porta Barcelona) y Can Rigalt. El pasivo de Caufec asciende a unos 180 millones de euros. El concurso de acreedores ha sido decretado al no poder cerrarse la refinanciación del pasivo con las cinco entidades de crédito acreedoras de Caufec.

Caufec no entró en el concurso de acreedores del grupo Sanahuja, decretado por el mismo juzgado número dos de Barcelona a finales de junio del año pasado. Este proceso concursal es uno de los mayores de España, con deudas por un total de 2.633 millones de euros repartidos en las cuatro principales empresas del grupo.

Caufec está participada en un 85% por las sociedades Sacresa Terrenos Inmobiliarios Promoción, Sanahuja Escofet Inmobiliaria y Sacresa Terrenos 2, que tramitan en el mismo Juzgado sus respectivos Concursos Voluntarios. Los administradores concursales, Alicia Herrador, del despacho Jiménez de Parga, y el auditor de cuentas Jordi Safons, son los mismos que intervienen en los concursos de Sacresa y Sacresa Terrenos 2.

El proyecto Porta Barcelona ha sido una de las iniciativas estrella del grupo Sacresa. Es un plan urbanístico en el municipio de Esplugues de Llobregat, en el límite con el término municipal de Barcelona. Consiste en una actuación sobre 40 hectáreas de terreno en las que se pretende construir un centro comercial, un hotel de cuatro estrellas y dos torres de oficinas que podrían alcanzar los 80 metros de altura

Sacresa es una de las principales empresas promotoras catalanas y llegó a ser la mayor inmobiliaria de España cuando controlaba Metrovacesa, en la que entró el año 2003. La familia inició en 2006 una batalla por Metrovacesa, de la que pese a ser los primeros accionistas no tenían el control, en manos de su ex presidente Joaquín Rivero. Sanahuja lanzó varias ofertas de compra de acciones hasta que logró desbancar a Rivero y superó el 80% del capital de Metrovacesa.

El gasto en el que incurrió Sanahuja para lograr su propósito, cercano a los 5.000 millones de euros, fue inasumible cuando la crisis financiera e inmobiliaria se sumó a la necesidad de Sanahuja de ir devolviendo los préstamos. Finalmente, Sanahuja cedió la mayor parte de sus acciones a la banca acreedora, que ahora controla Metrovacesa.

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