La venta de activos devuelve a Ferrovial a los números negros
Las desinversiones han dado aire a las cuentas de Ferrovial. La compañía presidida por Rafael del Pino anunció ayer un beneficio de 2.163 millones en 2010. De esta manera, pudo dejar atrás las pérdidas de 73,52 millones cosechadas el pasado ejercicio.
Entre estas ventas resalta el traspaso de un 10% de la autopista canadiense 407ETR, que generó un resultado neto de 2.471 millones, correspondientes a la venta del paquete (467 millones de euros) y a la revalorización a precio de mercado de la participación del 43,23% retenida (2.005 millones). Además, el pasado 15 de septiembre completó la venta del 60% de la participación en Cintra Chile a la colombiana ISA.
En lo que respecta al negocio, no fue un año fácil para la compañía, que tuvo que depender mucho de la actividad internacional para compensar la apatía de la actividad doméstica. La facturación cayó un 0,5% hasta 12.169 millones. Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se redujo un 3%, hasta los 2.514 millones. La actividad constructora generó unos ingresos de 4.525 millones, con un leve ascenso del 1,1%. El negocio internacional en esta división generó un crecimiento del 19%.
El negocio aeroportuario, en el que opera a través de BAA, mantuvo el tipo, a pesar de las dificultades generadas por el volcán islandés, que provocó el cierre del espacio aéreo en Inglaterra entre el 15 y 20 de abril y principios de mayo, la huelga de empleados de cabina de British Airways (34 días) y el cierre de pistas a causa del temporal de frío y nieve en diciembre. Las ventas de esta división retrocedieron un 9% hasta 2.793 millones.
Por otro lado, Ferrovial pagará a sus accionistas un 5% más de dividendo con cargo a 2010 de lo que abonó en 2009.