La mayor factura energética eleva un 1,7% el déficit comercial español hasta noviembre
En 2009, el déficit comercial de España, que mide la diferencia entre exportaciones e importaciones, cerró en 41.801 millones de euros, prácticamente la mitad que en el ejercicio anterior. Esa tendencia a la reducción se mantuvo en la primera mitad de 2010, pero se vio interrumpida en la segunda por el fuerte encarecimiento del barril de Brent, de referencia en Europa.
Desde agosto, el precio se ha incrementado un 22% y ha dañado especialmente a los países no productores y cuyo sistema productivo depende en gran medida de las compras de crudo, como ocurre en el caso de España.
De los 47.000 millones de euros de déficit acumulados hasta noviembre, según los datos hechos públicos ayer por el Ministerio de Industria, la mitad (22.495) corresponde a las compras al exterior de petróleo y derivados.
El encarecimiento del crudo ha tirado de las importaciones, que crecieron un 13,7% hasta noviembre, aunque no ha conseguido superar el empuje experimentado por las exportaciones, con un aumento del 17,5% en tasa interanual.
La subida del precio del barril de Brent también ha propiciado un incremento de los precios en toda la zona euro, encabezados por España, que cerró 2010 con una inflación del 3%, mientras que la zona euro lo hizo en el 2,2%.
En este escenario, el consejo de gobierno del BCE recalcaba ayer en su boletín mensual la existencia de presiones alcistas a corto plazo sobre la inflación, debido fundamentalmente a los precios de la energía. "De cara a los próximos meses, las tasas de inflación podrían seguir aumentando temporalmente y es probable que se mantengan ligeramente por encima del 2%, debido principalmente a la evolución de los precios de las materias primas, antes de moderarse nuevamente hacia finales de año. Sin embargo, las expectativas de inflación siguen firmemente ancladas en niveles compatibles con el objetivo de mantener la inflación en tasas inferiores, aunque próximas, al 2% a medio plazo", apuntaba ayer el boletín.