BBK y Cajasur pactan el último de los ajustes de plantilla en las cajas
El ajuste laboral en Cajasur es el último de los realizados en las cajas tras la quincena de fusiones abordadas hasta ahora. El recorte afectará al 21,5% de la plantilla de la entidad andaluza, que cuenta con 3.100 empleados.
El ajuste de Cajasur se saldará con un total de 668 bajas. La mayoría por prejubilaciones (428), otros 130 mediante bajas indemnizadas y 110 más por suspensiones de contrato compensadas. Los prejubilados, que cumplen 56 años antes del 31 de diciembre de 2013, dejarán el empleo con el 87% del salario neto, además de una prima social lineal de 30.000 euros en cada caso para potenciar esta vía de ajuste.
Las bajas indemnizadas tienen diferentes retribuciones, según la antigüedad en la caja. Los que obtendrán la liquidación más alta (33 mensualidades) serán los que lleven 15 años o más en nómina. Las suspensiones de contrato tendrán una duración de cuatro años y a los afectados se les abonará cada ejercicio el 25% del salario.
La de ayer fue la segunda reunión de la Mesa de Trabajo entre responsables de la entidad y sindicatos, de los que Aspromonte es el mayoritario por representación.
BBK Bank Cajasur comenzó a operar el pasado 1 de enero y la entidad vasca ya ha cubierto una ampliación de capital de 800 millones de euros en su participada para equilibrar el balance heredado de la caja cordobesa, que a septiembre del año pasado acumulaba unas pérdidas de unos 900 millones de euros. Tras la integración de la entidad andaluza, BBK mantiene un coeficiente de solvencia del 13,8% y su tasa de morosidad se sitúa en el 2,49%.
Reordenaciones
Antes del pacto alcanzado ayer en Córdoba entre los responsables de BBK Bank y los sindicatos, el resto de las cajas que han protagonizado procesos de integración ya habían cuantificado el ajuste laboral en sus plantillas. Banco Financiero y de Ahorros, que integra a Caja Madrid, Bancaja y a otras cinco entidades, suma una plantilla de 22.600 personas, en las que no entrarán unos 4.000 profesionales que causarán baja por la vía de las prejubilaciones y las bajas incentivadas.
Banca Cívica, el SIP de Caja Navarra, CajaCanarias y Cajasol, dejará fuera de su proyecto a 1.100 empleados, que irán a la prejubilación en los próximos dos años (representan el 11,5% de la plantilla de la nueva entidad).
Por su parte, la suma de Cajastur, CAM, Caja Extremadura y Caja Cantabria supone la resta 2.200 puestos de trabajo, un ajuste que solucionará en gran parte, como en los casos anteriores, a través de la prejubilaciones. También cuantificaron sus excedentes laborales Caja España y Caja Duero (900 prejubilaciones para dejar un colectivo de 6.000 empleados).
Para los próximos meses se pueden abordar nuevas fusiones entre cajas que todavía no han participado en ningún proceso de concentración. Es el caso de las entidades vascas Caja Vital y Kutxa. La primera ha admitido contactos para una fusión fría con BBK, y la segunda ha manifestado recientemente que está abierta a participar en las conversaciones. Unicaja ha iniciado contactos para sondear una fusión con Ibercaja.
Fitch otorga un rating BBB+ a Mare Nostrum
Fitch otorgó ayer a Mare Nostrum una rating a largo plazo BBB+ con perspectiva "estable". Este banco es la cabecera del sistema de protección institucional (SIP) integrado por Cajamurcia, Caixa Penedès, Caja Granada y Sa Nostra. En paralelo, la agencia ha retirado la calificación de estas entidades. La firma británica destacó "la sólida franquicia de las cuatro cajas en sus mercados domésticos, escasa concentración de riesgos y exposición a los mercados". Sin embargo, también contempla "la concentración de la financiación en el sector inmobiliario, el deterioro de los activos, los riesgos derivados de la integración y la débil economía de España". Fitch sostiene que "la rentabilidad de Banco Mare Nostrum sufrirá por los bajos tipos de interés, la débil evolución del negocio y el encarecimiento del crédito". El SIP ha solicitado 915 millones de euros al FROB.