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Análisis

Fusiones y compras animarán la Bolsa en los próximos meses

Las empresas han ahorrado durante la crisis y tienen dinero para invertir. Los sectores con más papeletas para recibir ofertas son el financiero, el siderúrgico y el de 'utilities'.

Serán en los próximos meses uno de los motores de las cotizaciones de sectores y compañías. Los movimientos corporativos, ya sean fusiones o adquisiciones (M&A, en sus siglas en inglés), van a vivir un nuevo impulso en el año que comienza, y podrán así dar alegrías a los inversores. Esta es una idea compartida por bancos de negocio y consultoras, que prevén que las empresas aprovechen los errores que han cometido sus competidores en este ya largo periodo de crisis y la caída de los precios de algunos rivales para crecer a través de las compras.

En realidad, la reanimación de esta actividad se ha visto en parte en 2010, con operaciones como la toma de Genzyme por Sanofi-Aventis, de divisiones internacionales de GDF Suez por International Power o la supertransacción liderada por Petrobras. E, igualmente, después de un largo periodo de negociaciones, el acuerdo de fusión entre Iberia y British Airways, o la venta del 40% de Repsol Brasil a Sinopec, mientras Telefónica ha alcanzado un pacto con Portugal Telecom para hacerse con el control de la operadora de móviles brasileña Vivo. Según los datos de Bloomberg, los datos provisionales de 2010 de M&A ascienden a 2,19 billones de dólares, por encima de 2009, pero aún lejos del récord alcanzado en 2007.

Pero ¿qué se espera para el ejercicio que ahora comienza? ¿Cuáles pueden ser los detonantes para las concentraciones empresariales? Desde Inversis, se señala que existen significativas posibilidades para que esos movimientos se produzcan. Por un lado, porque el mercado lleva exigiendo desde hace tres años niveles más bajos de endeudamiento, lo que facilita las adquisiciones. Pero, al mismo tiempo, debido a que "la estabilidad en los márgenes y el incremento de las ventas ha permitido la acumulación de caja".

El volumen de M&A del pasado ejercicio rozó los 2,2 billones de dólares, muy por debajo todavía de los niveles récord que se alcanzaron en 2007

Aporta, además, otros argumentos. Como que las valoraciones en los mercados de renta variable son en general atractivas y que las restricciones crediticias tenderán a moderarse. El equipo de Inversis cita un aspecto estratégico: que si bien es cierto que un exceso de deuda es negativo, lo es asimismo que la caja de las empresas sea muy elevada. Y añade que en la búsqueda de una estructura financiera óptima, las fusiones y adquisiciones son una de las opciones para rebajar un exceso de caja, frente a pagar dividendos o la recompra de acciones.

Cómo detectar movimientos

Los analistas de Inversis se preguntan cómo es posible exponerse a las fusiones. Y llegan a la conclusión de que se puede reconocer alguna de las áreas más proclives a llevar a cabo adquisiciones, como son los sectores atomizados. O las empresas con fuerte capitalización bursátil, ya que cuentan con más facilidad de acceso a créditos. Otra guía es la de los valores que pertenecen a las áreas que históricamente son las más activas: energéticas, materiales básicos y consumo.

Mientras, las empresas objetivo suelen ser las de pequeña y mediana capitalización, las que están en áreas con fuertes barreras de entrada, así como las que cuentan con una capacidad significativa de generación de caja.

La experiencia acumulada a lo largo de los últimos años muestra como los movimientos corporativos han sido un motor de las cotizaciones, especialmente si las empresas son objeto de una opa dineraria y aún más si se produce o se intuye que se va a producir una batalla por su control. Así, compañías con elevadas capitalizaciones bursátiles -y, por tanto, más difíciles de influir- como algunas mineras han presentado revalorizaciones espectaculares. Los ejemplos son diversos; por ejemplo, Xstrata subió un 209% en 2009 y un 34,9% en 2010, mientras que Río Tinto se apuntó un 182% en 2009 y un 34,6% en 2010.

Más cerca, el primer puesto en el ranking de revalorizaciones del Ibex en 2010 ha estado ocupado por Iberia, que ha materializado su fusión con British Airways, por más que en este caso lo que se ha ofrecido a los inversores son títulos del grupo resultante.

Las previsiones de que este año que comienza puede dejar atrás baches anteriores -especialmente la caída de 2009, año en el que se volvió al volumen de 2004- se apunta desde Deutsche Bank. "Los grupos cuentan con una elevada liquidez en sus balances, lo que, combinado con unas valuaciones equilibradas, podría promover la actividad de M&A", manifiesta el equipo del banco alemán. Estima que las compañías proyectarán sus planes de crecimiento a través de los procesos de consolidación de las transacciones internacionales, y puntualiza que las operaciones transfronterizas suponen ya el 29% del total de las fusiones y adquisiciones del mundo.

Como otras entidades, nombra el cambio que se está registrando, con el aumento creciente del protagonismo de Asia-Pacífico, aunque prevé una recuperación para Europa. Por otro lado, Deutsche Bank precisa que las ofertas hostiles, que ahora constituyen aproximadamente el 10% de la actividad, permanecerán previsiblemente en ese nivel.

Centrado en el análisis del mercado español, Raúl Vázquez, socio de Ernst & Young responsable del área de transacciones, asevera que la actividad en 2010 mejoró respecto al año anterior, pero que a partir de la crisis griega se percibió el impacto de los problemas de financiación. Es una cuestión, agrega, que no ha cambiado significativamente; y añade que se sigue prestando dinero con unos criterios muy selectivos, como, por ejemplo, que la relación deuda-Ebitda (resultado bruto de explotación) no sea superior a las 3 o 4 veces. Si bien, observa un significativo protagonismo del capital riesgo, incluso con operaciones en las que estas entidades están a ambos lados de la transacción: son compradores y vendedores.

Mejora la competitividad

En opinión del directivo de Ernst & Young, los sectores más activos en España serán los defensivos como el de infraestructuras -a las que en general no faltan compradores- o los relacionados con la salud, así como el sector bancario. Cree que las grandes corporaciones, tipo Telefónica, mantendrán su tendencia al crecimiento no solo vía orgánica, aunque se dirigirán básicamente al exterior, hacia países como China, India, Brasil o Colombia.

Otra idea que destaca es que a poco que las circunstancias lo permitan, los movimientos continuarán ya que son beneficiosos para las empresas. "Elevan su competitividad, obtienen sinergias y mejoran su poder y capacidad de influir en el mercado en donde operan", concluye.

En una línea similar se expresan los empresarios encuestados por UBS y Boston Consulting Group. En el informe se indica que el apetito por la M&A entre las grandes empresas europeas es más fuerte que entre la medianas. Así, entre los primeros un 36% de las consultadas dice que probablemente o muy probablemente emprenderá durante los próximos doce meses una adquisición "a larga escala". Los autores del informe explican que estas compañías tienen más fácil acceso a la financiación -como, por ejemplo, a través de la emisión de bonos- que las de menor tamaño. Pero tampoco las diferencias son muy sustanciosas, ya que el 30% de las medianas (con una capitalización bursátil de entre 5.000 y 20.000 millones de dólares) también planean crecer a través de hacerse con el control o unirse a sus competidores

Por sectores los que parecen más proclives con utilities (servicios públicos, básicamente eléctricas), bancos, seguros, mineras y siderúrgicas, así como el aeroespacial. Por el contrario, los más reticentes a abordar grandes adquisiciones o fusiones son los de biotecnología, bienes de lujo y servicios de telecomunicaciones.

Un sentimiento que subyace en la opinión de los empresarios es que el pesimismo retrocede, y que los grupos que disponen de liquidez van a buscar oportunidades de crecimiento. La renovada pasión por crecer, aunque ya en 2010 se ha registrado un aumento de la actividad, hace que solo el 6% de los 179 directores generales de las empresas encuestadas se decante a favor de la recompra de acciones o por mayores dividendos en lugar de invertir en adquisiciones. En esta línea, Borja Gómez Orue, director de M&A de KPMG, manifiesta que los dos principales factores que han ralentizado la actividad en estos últimos ejercicios se van a atenuar. "Y son la dificultad de acceso a la financiación y la disparidad en las expectativas de precio entre comprador y vendedor", dice. También comprueba que hay una visión más positiva en el sector de capital riesgo.

Añade que, en general, en 2011 ven más operaciones de consolidación para aumentar cuota de mercado y elevar los ratios de eficiencia en un entorno económico adverso, pero también adquisiciones para la expansión internacional. En cualquier caso, en la mayoría de los casos se tratará de operaciones de carácter intrasectorial y con énfasis en la preservación del core business: no creemos que las actividades de diversificación de actividad sean las protagonistas durante el próximo ejercicio.

Gamesa y BME, candidatos a opas

Entre las empresas que en opinión de UBS ofrecen una buena exposición a las fusiones y adquisiciones están National Express (transporte), la acerera Klockner, Virgin Media y Wolters Kluwer (medios). Y citan a Anglo American (minería), Remy Cointreau (bebidas) o las compañías de lujo Beiersdorf y Burberry. De finanzas, Alpha Bank y Postbank.De España solo se cita al fabricante de generadores eólicos Gamesa. Su fuerte caída en Bolsa podría provocar que fuera la diana de una opa. La compañía llegó a caer a niveles próximos al precio de referencia de su debut bursátil de 4,2 euros por título, en octubre de 2000, y su precio se hunde cerca de un 90% respecto a su récord histórico.En opinión de Inversis, entre las cotizadas que pueden ser protagonistas de operaciones de esas características a lo largo de 2011 están -además de BME y Antena 3-, las francesas Thales y Technip, la británica Burberry y las estadounidenses Yahoo y Netflix.Los mercados emergentes van a seguir ocupando un papel muy significativo, con especial protagonismo de Latinoamérica. Muchos empresas nacionales están mirando activamente el mercado latinoamericano (especialmente Brasil, Colombia y Perú) y, en menor medida y en orden descendente, Europa Occidental, Europa Oriental y Asia.Y Borja Gómez Orue, de KPMG, añade que en general y dado el contexto actual, creen que tendrán más prevalencia los sectores de carácter defensivo. Sectores como el energético (especialmente el tradicional) y medio ambiente, el financiero, infraestructuras, el de tecnología o el de servicios a empresas seguirán siendo objeto de bastantes operaciones durante 2011. Cita, entre otras ventajas de estos procesos, la diversificación geográfica y una mayor facilidad de acceso a distintas fuentes de financiación (renta variable, bonos, etc.) que puede redundar de nuevo en mayores cotas de rentabilidad neta y en mayores posibilidades de seguir creciendo.

Mucho mejor que los índices

Las cotizadas que pueden ser el objetivo de una oferta de compra suelen comportarse mejor en Bolsa que las del resto de su sector: cotizan con prima. UBS tiene una cartera formada por 56 empresas europeas -27 de ellas británicas- a las que les puede caer una oferta de compra. La entidad suiza señala que la lista supera en cerca de 20 puntos porcentuales la evolución del índice Eurotop 300.Entre los valores de la lista de UBS, aparecen sectores de todo tipo. Desde el bancario, como Alpha Bank, hasta el de bebidas (Remy Cointreau), pasando por el automovilístico (Peugeot), el de cosméticos (Beiersdorf) o telecos (Sonaecom o Virgin Media, por ejemplo), entre muchos otros. La entidad menciona incluso posibles compradores de las empresas. Así, especula por ejemplo que un potencial comprador del fabricante de software británico Misys podría ser la estadounidense Oracle. Otro caso es el de la empresa de transporte holandesa TNT. A juicio de UBS, UPS y FedEx podrían estar interesadas en ella.Un caso todavía sin resolver y en el que está implicada una compañía española es el de Talecris. Grifols le lanzó una oferta de compra en junio del año pasado y todavía no está claro su final. El supervisor de la competencia de Estados Unidos (FTC) todavía tiene que dar su aprobación -o, lo que es lo mismo, no manifestar su oposición- a esta operación. Ambas compañías han afirmado que no esperan que se cierre antes del próximo 17 de febrero. Si finalmente sale adelante, los accionistas de Talecris obtendrían una prima en el entorno del 20% respecto a su cotización actual.

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