España queda al margen de la mejoría industrial de la UE
La recuperación de Alemania ha revitalizado los pedidos a la industria europea, que crecieron un 14,8% en octubre. Sin embargo, España ha quedado al margen de esa mejoría con un leve aumento del 2,8%, el menor de la zona euro.
La fulgurante salida de la crisis de Alemania (la primera economía europea y el segundo mayor exportador del mundo), con un crecimiento del 3,7% del PIB en el conjunto de 2010, según las primeras estimaciones, ha propiciado un fuerte repunte de los pedidos a la industria europea. En octubre, este indicador creció un 14,8% en tasa interanual, según los datos hechos públicos ayer por Eurostat, impulsado por la mayor demanda de bienes intermedios y de bienes de equipo. En ambos casos, los pedidos crecieron por encima del 16% ante la necesidad de las grandes compañías alemanas de alimentar sus factorías.
Fuera de esa mejoría ha quedado España, cuyos pedidos industriales tan solo crecieron un 2,8% en octubre, lo que supone el nivel más bajo de los dieciséis países que comparten el euro. Un dato que podría haberse visto corregido en noviembre, a tenor de la recuperación exhibida por la producción industrial española. Este indicador creció, según el INE, un 2,7% en noviembre (un 2,3% si se corrigen los efectos del calendario), lo que supone el nivel más alto en cinco meses y un fuerte repunte tras dos meses de fuertes caídas.
Por destino económico de los bienes, los sectores industriales que más han influido en el repunte de la producción industrial han sido los bienes intermedios, con una variación anual del 4,5% y una repercusión de 1,5 puntos, y la energía, con una tasa anual del 7,8% y una repercusión en el índice general de un punto.
Fuerte deterioro de los servicios en el segundo semestre de 2010
La actividad comercial de los servicios en España ha sufrido un profundo deterioro a finales de 2010. El índice, que elabora mensualmente Markit Economics, se situó en 46,2 puntos en diciembre, el nivel más bajo en un año. Este descenso muestra la debilidad de esa actividad en España, que supone dos terceras partes del PIB y del empleo.El informe asegura que las empresas están respondiendo a la débil demanda a través de una "continua destrucción de empleo", mientras que tratan de estimular los nuevos pedidos a través de continuos descuentos de precios.Un dato que revela también ese deterioro es la confianza de los consumidores en España, que retrocedió en diciembre al nivel más bajo desde mayo de 2009, como consecuencia de la peor percepción sobre la evolución económica actual y la que esperan para los próximos meses, según el índice que elabora el ICO.