Los bancos pueden verse abocados a bajar dividendo, según Banca March
El panorama actual hace que Banca March infrapondere el sector financiero. Tampoco descartan que algún banco español tenga que reducir dividendos.
La cartera de activos que proponen para 2011 es más amplia, pero, en opinión de los directivos de Banca March, el más atractivo es la renta variable. No obstante, como indicó Ofelia Marín, directora de análisis, es precisa una cuidada selección. Dan prioridad a las Bolsas de Latinoamérica y Asia Pacífico, están neutrales en Estados Unidos, Japón y Europa, y negativos en España. Por sectores prefieren los valores vinculados a la industria, materias primas, telecomunicaciones y energía. Mientras, infraponderan el financiero.
Para acceder a la pujanza de Latinoamérica, destacó dos vías: la directa, que cuenta con ciertos inconvenientes por las características de algunas Bolsas, y la entrada en empresas europeas con exposición a ese mercado. Entre las que esa región tiene más peso en sus ingresos están Telefónica, Repsol y los dos grandes bancos. Son más proclives a la operadora, aunque en España en general aconsejan más las compras tácticas.
Respecto a los dividendos, uno de los ganchos del Ibex, Miguel Ángel García, director de inversiones, manifestó que la fortaleza de los resultados hace prever que las empresas puedan mantener la retribución a sus accionistas. Puntualizó que los bancos generan más dudas, aunque sea en un contexto más negativo que el actual. En general prevén que sea un año complicado, no solo para los países periféricos y con unos mercados que a menudo están sobrerreaccionando.
EE UU se enfrentará a "importantes desafíos en 2011", según la gestora Dexia Asset Management. En sus perspectivas económicas para el próximo año, prevé que la economía estadounidense mantenga un crecimiento del PIB del 2,5%, una tasa de paro estable en torno al 10% y una política fiscal restrictiva, por lo que la necesidad de contener su deuda pública "requerirá un reequilibrio de la cuenta corriente", algo que podría llevar a cabo "con una caída gradual del 12% en el tipo de cambio efectivo del dólar", esgrime. Para Europa, contempla un crecimiento del 1,6%, con una mejora en el empleo y el consumo, pero siempre que el euro se mantenga controlado y se apliquen los planes fiscales.