OHL entra en Nueva York con su mayor compra en EE UU
OHL ha apuntalado su presencia en Estados Unidos a través de la compra del 50,1% de la constructora de obra civil Judlau. Asentada en Nueva York, la toma del control de la nueva subsidiaria ha costado 72,5 millones de dólares (unos 55,6 millones de euros), más un pago variable en función del Ebitda que se obtenga hasta 2012. Se trata de la mayor adquisición de la española en Norteamérica, donde ya controla cinco constructoras en el área de Florida. Judlau prevé ingresar 300 millones de dólares este año (unos 230 millones de euros) y amasa una cartera de 500 millones de dólares (unos 384 millones de euros).
OHL ha dado un golpe de efecto en Estados Unidos al hacerse con una constructora de obra civil en Nueva York por 72,5 millones de dólares (unos 55,6 millones de euros). Se trata de la firma Judlau Contracting, en la que ha tomado el 50,1%. El grupo de Villar Mir, asentado hasta ahora en Florida, realiza con esta su mayor operación corporativa en Norteamérica, donde analiza nuevas adquisiciones para atender al plan de infraestructuras de la Administración de Obama.
El área de Construcción Internacional, que dirige Francisco Marín, había abierto oficina en Nueva York el pasado mes de marzo. Pero es ahora cuando gana peso en el área Noroeste del país al hacerse con una empresa que pretende cerrar 2010 con una facturación de 300 millones de dólares (unos 230 millones de euros) y una cartera de contratos por 500 millones de dólares (384 millones de euros). La operación incluye un pago adicional por parte de la española en función del Ebitda que logre cosechar Judlau entre 2009 y 2012.
La nueva filial de OHL mantendrá su equipo directivo, encabezado por el fundador Thomas Iovino. Los plandes del grupo que preside Juan Miguel Villar Mir pasan por potenciar la estructura financiera de Judlau para que acuda a contratos de concesión, o colaboración público-privada en infraestructuras, tanto en Nueva York como en otros estados de EE UU.
El desembarco de OHL en Norteamérica arrancó en julio de 2006 con la toma del control en las constructoras Community Asphalt y Tower Group, a las que se unieron Arellano Construction y Stride Contractors, en 2008. En total, la inversión en compras ha superado los 200 millones de dólares en los últimos cuatro años. La constructora española declaró en 2009 unos ingresos de 308 millones de euros procedentes de Estados Unidos. Su área de Construcción Internacional pesa ya un 42% en la facturación global, frente al 23% de Concesiones, o el 27% de Construcción Nacional.