La candidatura ibérica presume de infraestructuras
Esta semana se conocerá al organizador del Mundial 2018.
Con la menor inversión necesaria para poner el proyecto en marcha, las mejores condiciones hoteleras y de infraestructuras en general, la candidatura ibérica parte como favorita para organizar el Mundial de fútbol de 2018. La elección, que se conocerá el próximo día 2, viene rodeada de polémica por posibles sobornos que se cerraron con la suspensión de 2 de los 24 miembros del comité ejecutivo de la FIFA que tomará la decisión.
Finalmente, la FIFA ha exculpado totalmente a la candidatura hispanolusa y a la catarí, para 2022, a las que se ligaba en un apaño para intercambiar votos, y todo hace indicar que la opción ibérica es la más redonda. Y ello a pesar de que el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, se mostró hace unos meses poco inclinado a las alternativas transfronterizas, después de la experiencia de Corea y Japón en 2002.
Los sucesivos informes sobre las candidaturas, sin embargo, han sido sumamente favorables a la opción ibérica. La comisión de evaluación de la FIFA, que presentó sus conclusiones el mes pasado, destacaban por ejemplo que la inversión económica que exigiría organizar el campeonato en España y Portugal es la más reducida: dados los estadios existentes, bastarían 2.000 millones de dólares (unos 1.500 millones de euros) para concluir las infraestructuras previstas, por los 2.430 de la candidatura de Benelux, los 2.540 de Inglaterra o los 3.820 de Rusia.
La candidatura del Este, sin embargo, se presenta como la máxima rival a priori. De su lado está que nunca se ha organizado un Mundial en un país eslavo, así como la fuerte disposición a la inversión por parte del actual Gobierno. Sin embargo, a la falta de infraestructuras se suman las dudas sobre la seguridad o las tremendas distancias: entre Sochi y San Petersburgo, dos de las sedes, hay 2.200 kilómetros, poco menos que entre Madrid y Viena.
Las infraestructuras hoteleras consolidadas, que garantizan 100.000 habitaciones de hotel, y la red de AVE que hace posible un rápido desplazamiento de aficionados y profesionales son otros elementos a favor de la candidatura ibérica.
De las 12 sedes previstas, solo dos, Lisboa y Oporto, serán portuguesas. El país vecino ha descartado de entrada a localidades que estrenaron estadio para la Eurocopa 2004, caso de Braga, Coimbra o Aveiro. Esos estadios tienen capacidad para 30.000 espectadores, y se exigen al menos 40.000.
España, por su parte, presenta por el momento 16 ciudades, de las que serán escogidas 10. El proyecto incluye a cinco estadios que aún no están construidos, como el nuevo de Madrid que pertenecerá al Atlético, el nuevo San Mamés de Bilbao, o los proyectados para Zaragoza, Valencia y Málaga.
Para 2022
La FIFA anunciará también la sede del Mundial de 2022, al que no puede concurrir ninguna aspirante europea o suramericana por albergar las citas previas.Estados Unidos. Organizó en el 94 el campeonato con mejores asistencias. Excelentes estadios.Australia. País no muy amante del fútbol pero con amplia experiencia organizadora.Qatar. Dispuesto a fuertes inversiones para climatizar estadios contra el calor.Corea del Sur. Tiene reciente la organización de 2002 con demasiados estadios pequeños.Japón. Problemas similares a los de Corea.
Secretos de campeón
El seleccionador nacional Vicente del Bosque, que lideró al campeón del mundo el pasado verano, desvela sus fórmulas en El método Del Bosque (Aguilar). El periodista de As Joaquín Maroto, autor del libro, ha elegido una estructura episódica para analizar al técnico, que admite inspirarse en El Conde Lucanor para afrontar las dificultades. "Este es un libro sin dogmas, solo con opiniones", destacó Del Bosque en la presentación, en la que dejó algunas observaciones orientativas: "No creo que escuchar a los jugadores sea un síntoma de debilidad" o "no hay receta que sirva para todos".