Los ministros europeos acuerdan activar la ayuda financiera a Irlanda
Los ministros de Finanzas europeos acordaron hoy la activación del mecanismo financiero en ayuda de Irlanda, según informó el titular belga y presidente del Consejo Ecofin de la UE, Didier Reynders.
La ayuda será de un monto "inferior a los 100.000 millones de euros" y será financiada a través del mecanismo de asistencia del presupuesto comunitario, de la Facilidad de estabilidad financiera creada en julio pasado y del Fondo Monetario Internacional, según declaraciones de Reynders a la agencia Belga.
El Reino Unido y Suecia, dos países de la UE que no son miembros de la zona euro, participarán también en la ayuda.
El primer ministro irlandés, Brian Cowen, confirmó que, a petición de su Gobierno, los ministros europeos de Finanzas acordaron hoy la activación del mecanismo financiero en ayuda de Irlanda. El Taoiseach (primer ministro irlandés) adelantó que el Ejecutivo abre ahora otra ronda de negociaciones con las autoridades competentes para determinar los detalles y condiciones del rescate, cuyos fondos irán destinados, por un lado, a corregir la política presupuestaria del Estado irlandés y, por otro, a sanear su sistema bancario.
Aunque el dinero irá destinado principalmente a los bancos, los préstamos serán concedidos al Estado irlandés, que se hará responsable de su devolución.
Cowen ha anunciado además que el "tamaño" del sistema bancario de su país se reducirá significativamente como parte del programa de reestructuración contemplado en el plan de rescate.
Las condiciones a las que quedará sujeto el paquete de ayuda serán definidas en los próximos días, de común acuerdo entre las autoridades irlandesas y las instituciones internacionales participantes en la operación: la Comisión Europea, el Banco central Europeo (BCE) y el FMI.
Irlanda es el segundo estado de la zona euro que requiere la ayuda del resto de los socios para evitar la suspensión de pagos.
En mayo pasado, por primera vez en la historia de la unión monetaria europea, los socios tuvieron que improvisar un paquete financiero para Grecia por valor de 110.000 millones de euros, para un período de tres años, ante la imposibilidad de ese país de financiarse a precios razonables en el mercado.
Plan de austeridad
El Gobierno irlandés ha elaborado un plan de austeridad para los próximos cuatro años que busca reducir el déficit público en 15.000 millones de euros para volver a situarlo por debajo del 3% en 2014. El programa prevé un esfuerzo inicial de consolidación fiscal de 6.000 millones para 2011.
Dublín se había resistido hasta ahora a aceptar la ayuda de la UE para no perder soberanía fiscal. Las autoridades irlandesas rechazan aumentar su impuesto de sociedades del 12,5%, uno de los más bajos de la UE, y que ha utilizado para atraer a las multinacionales a su territorio. Francia, Alemania o Austria han sugerido que este tipo debería incrementarse, pero han aclarado que no lo exigirán como condición para el rescate.
También el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha dicho que Irlanda dejará de ser un país de impuestos bajos tras esta crisis, aunque no se ha referido específicamente al impuesto de sociedades. Rehn ha explicado además que el objetivo prioritario del plan de rescate será que "el sector bancario irlandés se haga viable y sostenible, lo que requerirá bastante reorganización y reestructuración".
Los problemas de los bancos irlandeses han obligado a Dublín a comprometer 50.000 millones de euros en su rescate, lo que disparará el déficit público de este año hasta el 32% del PIB.