2017, año cero para el sector inmobiliario
"La construcción residencial ya no volverá a ser nunca más el motor de la economía española". Así de contundente se mostró ayer el presidente de la consultora inmobiliaria RR de Acuña & Asociados, Fernando Rodríguez y Rodríguez de Acuña, durante la presentación del Anuario Estadístico del Mercado Inmobiliario.
El factor demográfico y la elevada desproporción que persiste entre la demanda y la oferta son los dos principales problemas que acucian a esta actividad. Ni la explosión demográfica del pasado se va a repetir, ni las inmobiliarias volverán a promover casi 900.000 casas al año. Esto, entre otras cosas, tendrá como consecuencia que, según RR de Acuña & Asociados, el 60% de las empresas de la construcción desaparecerá a corto plazo.
Rodríguez indicó que la actividad está "estancada" a corto plazo, y que la recuperación "a medio plazo" vendrá condicionada por la situación económica de toda la Unión Europea.
No obstante, cerca de la mitad del sector, a su juicio, podrá "sobrevivir" a la crisis. Según el estudio de RR de Acuña, el excedente total de viviendas sin vender ascenderá a finales de este ejercicio a 1,5 millones de inmuebles, y tardará al menos seis años en absorberse, ya que la demanda total actual oscila entre las 240.000 y las 280.000 casas al año.
La consultora aseguró que estos datos no significan que hasta 2017 no vaya a haber "ningún tipo de reactivación" de la promoción inmobiliaria, sino que a partir de 2013 comenzará a absorberse el stock y a estimularse la promoción de nuevas viviendas, aunque de forma selectiva, solo en determinadas zonas de España.
Asimismo, el informe señala que la disminución de la población joven (de entre 25 y 35 años) prevista para los próximos diez años, que se cifra en torno a los 2,3 millones de personas, hará también que se reduzca la creación de nuevos hogares, y, por lo tanto, la demanda de viviendas. En total, RR de Acuña & Asociados calcula que entre 2010 y 2019 se generarán unos 2,5 millones de nuevos hogares, apenas 250.000 al año. Además, destacó que la capacidad de producción de la construcción se encuentra cinco veces por encima de su actividad real, y que el número de desempleados en el sector se incrementará al menos en 500.000 personas más en 2011.