Los guiños del Gobierno al sector privado
El plan de Zapatero prevé elevar los incentivos fiscales a empresas
La reforma del sistema público de pensiones tendrá, lógicamente, claras consecuencias en el sector privado de los planes de previsión. Esta actividad ya está siendo fomentada mediante fuertes ventajas fiscales a la hora de desgravar los fondos de pensiones contratados. Una facilidad que para muchos supone la clave de su supervivencia. No obstante, y aunque está por ver lo que decide la Comisión del Pacto de Toledo, la propuesta de reforma elaborada por el Gobierno contempla "revisar al alza los incentivos fiscales" de estos planes. Una medida que podría quedarse por el camino, admiten desde el propio sector, dado el ajustado programa de austeridad aprobado por el Ejecutivo.
En España, unos 10,6 millones de personas cuentan con un plan privado, el 80% de los cuáles lo hace a título individual. Desde la asociación de empresas del sector, Inverco, aducen que la sostenibilidad del sistema público pasa por rebajar la proporción de sueldo que se recibe como pensión (de media un 84%). Una reducción de la renta que obligaría a muchos a contratar planes privados. "Es lo que ocurre en la mayoría de países de la OCDE", explica el director general, Ángel Martínez-Aldama. En su opinión, el futuro pasa por que se incrementen el número de planes colectivos, o de empleo, que se crean a nivel de empresa por convenio colectivo.
Facilidades para el rescate
Los guiños que el Ejecutivo brindó al sector privado no terminan en el ámbito de los incentivos. En su documento de propuesta, el Gobierno apuesta por subir la edad de jubilación de los 65 a los 67 años. Dado que el cobro de un plan de pensiones está ligado indivisiblemente al retiro, esto restaría atractivo a esta industria, cuyos clientes deberían esperar dos años más para tener acceso a sus ahorros. Por eso, la propuesta del Ejecutivo matiza que sería conveniente que "a partir de los 65 años" el acceso al fondo privado "se desvincule de la obligación de jubilarse".
¿Competirán las empresas con el fondo del modelo austriaco?
El futuro del negocio de los planes privados de pensiones no sólo se verá afectado por el devenir de la reforma del sistema público de pensiones. La nueva normativa laboral también podría influir. æpermil;sta contempla la articulación durante 2011 del llamado modelo austriaco, una suerte de fondo privado individual que la empresa va alimentando, y que el trabajador arrastra consigo durante toda su vida laboral. Tendrá acceso a él en caso de ser despedido, para financiar su formación, y, en caso de no consumirlo antes, cuando se jubile. Semejante plan supondría un complemento a la pensión pública, que podría competir directamente con los fondos privados. El sector, sin embargo, asegura que sólo sería una tercera fuente de ahorro complementaria.