La temporada veraniega eleva la ocupación en 70.000 personas
El impacto de la temporada veraniega sobre los servicios turísticos llevó a una creación neta de 69.900 empleos en el tercer trimestre. Gracias a la estabilización de la población activa, el paro se redujo casi en idéntica cuantía, rebajando la tasa al 19,8%.
No vemos razones para pensar que el empleo pueda disminuir en los próximos trimestres". El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, utilizó el viernes esas palabras para dar por concluido el impacto de la crisis sobre la ocupación, que se ha saldado con dos millones de puestos de trabajo perdidos en poco más de dos años. Según la Encuesta de Población Activa publicada por el INE, la economía española creó en el tercer trimestre 69.900 empleos netos, sumando dos periodos consecutivos de respiro.
Campa reconoció que es más difícil decir si el paro ha tocado techo; además del empleo, influye en ella la incierta evolución de la población activa. Su estabilización entre julio y septiembre permitió recortar en 70.800 el número de desempleados, hasta los 4.575.000, y rebajar la tasa de paro en tres décimas, para situarla en el 19,8%. En todo caso, el mínimo avance de 800 activos sitúa la tasa de actividad en un nuevo máximo histórico del 74,53%.
La mejoría del empleo en el último trimestre debe matizarse; las vacaciones de verano impulsaron las contrataciones en el sector servicios, el único que creó empleo neto (144.000 puestos). Esa misma circunstancia conlleva un reverso negativo: la tasa de temporalidad repuntó en siete décimas, como resultado del aumento de 127.800 contratos temporales y la disminución de 34.900 en los indefinidos. Así las cosas, las primeras semanas de vigencia de la reforma laboral no han servido a su principal objetivo: mejorar la calidad en el empleo.
La estacionalidad resulta ser el factor decisivo para el aumento trimestral del empleo. De hecho, los datos desestacionalizados que publicó también el viernes el Ministerio de Economía indican una tendencia especular respecto a la mostrada por la EPA: el número de parados creció en 65.000 personas, y la tasa de paro repuntó en dos décimas, hasta situarse en el 20,2% de la población activa.
Aunque sigue su tendencia bajista, la caída interanual del empleo todavía alcanza el 1,7%. Todos los sectores moderan su deterioro, y el agrícola consigue incluso la primera creación neta de empleo desde el inicio de la crisis.
Familias. Primera caída en tres años de los hogares sin empleo
La reducción del paro del tercer trimestre ha permitido una inflexión en la variable socialmente más costosa del mercado laboral: el número de familias con todos sus miembros activos desempleados se redujo en 15.900 personas. Se trata del primer descenso del indicador desde hace tres años (es decir, desde el final de la última fase expansiva), y deja la cifra total en 1.292.300 hogares.
Duración. El paro de largo plazo continúa su escalada
El número de parados de larga duración -personas que llevan al menos un año buscando empleo- creció en 61.200 personas en el tercer trimestre. En los últimos doce meses, se contabilizaron 664.800 parados de larga duración adicionales, lo que eleva la presión sobre la posible prórroga de la ayuda de 426 euros durante seis meses a quienes hayan agotado su prestación.
Perfil. Los varones se benefician del grueso de la caída
El descenso del desempleo afecta en mayor medida a los varones (57.800 personas) que a las mujeres (13.000). La tasa de paro de estas se mantiene algo más de un punto por encima del 19,3% de los hombres, manteniendo una distancia similar a la de todo el periodo de crisis. Por edades, la mejora de la ocupación se centra en los tramos de menos de 25 años y más de 45.
Nacionalidad. Mejoran los extranjeros y los asalariados
En términos relativos, los extranjeros se benefician más que los españoles de la disminución del desempleo. Con todo, el paro de la población extranjera todavía roza el 30%, 11 puntos por encima de la de los nacionales. Por otra parte, el empleo autónomo continúa deteriorándose, con una caída trimestral de 18.500 puestos, frente al aumento de 92.900 empleos asalariados.