Un millar de personas reclaman la modificación del decreto del carbón
Un millar de personas, según la policía local y 5.000, según los organizadores, se manifestaron hoy por el centro de Ferrol para pedir la modificación del decreto del carbón que prima el mineral nacional sobre el importado que emplean las centrales térmicas gallegas de As Pontes y Meirama.
La marcha arrancó a las doce del mediodía desde la plaza de España, recorrió la calle Real y finalizó una hora más tarde, delante del ayuntamiento de Ferrol, en la plaza de Armas.
La actriz Mercedes Castro dio lectura a un comunicado conjunto de la plataforma constituida contra el decreto del carbón, que integra fundamentalmente a BNG, CIG y USTG.
El portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, que se incorporó en el último tramo de la manifestación, exigió en declaraciones a los medios la derogación de un decreto "inasumible" para Galicia y basado en una "decisión política" que castiga "aún más a dos comarcas ya castigadas por el desempleo".
Junto a Guillerme Vázquez, en la protesta participaron otros cargos de la formación nacionalista como el portavoz del Bloque en el Parlamento, Carlos Aymerich, el ex diputado Francisco Rodríguez o el ex alcalde de Ferrol Xaime Bello.
La plataforma pidió "unidad de acción aquí y en Madrid" y señaló que todos "somos necesarios para ganarle el pulso al gobierno", en alusión a las movilizaciones paralelas que lideran los alcaldes socialistas de As Pontes y Cerceda, que el viernes llevaron sus protestas hasta la puerta del Ministerio de Industria.
"No queremos un nuevo Astano", clamaron desde la plataforma, para subrayar que "As Pontes y Cerceda también existen, y Galicia existe".
A la protesta se sumaron responsables del PP y de la Xunta, como el director general de Industria, Ángel Bernardo Tahoces, el delegado de la Xunta en A Coruña, Diego Calvo, y el presidente del PP de Ferrol, José Manuel Rey Varela, junto a varios alcaldes populares de la comarca como el regidor de Cabanas, Germán Castrillón.
Fernando Blanco y Alberte Amado, los dos sindicalistas de la CIG en As Pontes que permanecieron en huelga de hambre durante una semana, también encabezaron la marcha ferrolana contra el decreto.