Salgado destaca la reducción del déficit español
La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda de España, Elena Salgado, destacó hoy la reducción del déficit español por cuenta corriente en las reuniones de Finanzas del G-20, donde se acordó reformas estructurales para potenciar el crecimiento a medio plazo.
"Nosotros hemos hablado del déficit por cuenta corriente, que hemos reducido mucho, a la mitad, en los últimos tres años", explicó la vicepresidenta económica en declaraciones a Efe, al término del encuentro de dos días de ministros de Finanzas del G-20 en Gyeongju (Corea del Sur).
Salgado dijo que España terminará el año con un déficit "un poco por encima del 4%" de su Producto Interior Bruto (PIB), el límite propuesto por Estados Unidos en esta reunión, "y por debajo el año próximo".
En el encuentro de Gyeongju, Estados Unidos hizo una ambiciosa propuesta para que los países del G20 fijen un límite a sus desequilibrios por cuenta corriente -sean déficit o superávit- equivalente al 4% del PIB, pero esos límites numéricos no encontraron apoyo mayoritario.
Salgado señaló que la palabra "cooperación" ha sido la más escuchada en este foro, último antes de la cumbre de jefes de Gobierno y de Estado del G-20 en Seúl en noviembre, y aseguró haber apreciado un ambiente muy positivo.
La ministra y vicepresidenta segunda dijo que el compromiso para que Europa ceda dos asientos en el Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional, acordado en el comunicado del G-20 de hoy, no perjudicará a España.
"Ocupamos un tercio de una silla rotatoria con Venezuela y México y no podemos contribuir a esa reducción", indicó, mientras recordó que hay países europeos que no rotan como Bélgica, Holanda o Suiza.
Según Salgado, con esta reforma pierden los europeos y ganan los emergentes como China, pues obtendrán sobre un 6% de la cuota de representación en el Fondo.
Elena Salgado destacó que en el comunicado se menciona a los países emergentes, pero también a los que tienen baja representación en relación al tamaño de su economía, por lo que, en su opinión, España "no tiene nada que perder, en todo caso ganar".