Slim y Telefónica se libran de Televisa como rival en el móvil mexicano
El magnate Carlos Slim y Telefónica recibieron ayer una buena noticia. El gigante azteca de los medios de comunicación, Televisa, ha roto con su socio y renuncia a entrar en la telefonía móvil de México.
Todo estaba preparado en la telefonía móvil mexicana para recibir a Televisa. El gigante audiovisual había diseñado su entrada en el mercado con una doble operación que incluía la compra de una participación en una empresa del sector para concursar unidas en la licitación de espectro celular y explotarlo de forma conjunta.
México, por su parte, desplegó la alfombra roja para recibir a la compañía de la familia Azcárraga. Televisa y su socia, Nextel, lograron a precio de saldo una licencia nacional de móvil, ya que el Gobierno impidió la participación en la puja de las grandes operadoras celulares del país, Telcel -propiedad del magnate Carlos Slim- y Telefónica, que tuvieron que conformarse con licencias regionales.
El objetivo del Gobierno era aumentar la competencia en la telefonía móvil mexicana, aunque no fueron pocas las voces que hablaron de trato de favor hacia Televisa. Al final, todo va a quedar en nada. La compañía audiovisual ha renunciado a seguir adelante con la alianza con Nextel. Después de semanas de rumores, ayer se hizo oficial. Televisa no comprará el 30% de la operadora mexicana, filial de la estadounidense NII Holdings.
Las razones no han quedado del todo claras. Nextel aludió ayer a los problemas regulatorios a los que podría enfrentarse Televisa en sus otros negocios por la entrada en la telefonía móvil, según Reuters.
Cualquiera que sea la explicación, la noticia dio ayer motivos de alegría para dos compañías: Telcel y Telefónica. La empresa de Carlos Slim es líder del sector, con más de un 70% de cuota, y la operadora española es su principal rival, con cerca del 20%. Ambas miraban con recelo la entrada de Televisa, con capacidad para dar desde el primer día ofertas cuádruples de telecomunicaciones, con telefonía fija, móvil, banda ancha y televisión, algo que ellas no pueden hacer.
Al romper con su socia, Televisa renuncia al celular. La licencia quedará en manos de Nextel, que mantiene sus planes para desplegar la red. Como rival, sin embargo, Nextel tiene mucho menos peso que Televisa, una empresa local, con apoyos gubernamentales y una capacidad financiera de la que carece la filial mexicana de NII Holdings.
Críticas en argentina
La repentina decisión de las autoridades de competencia argentinas de negar efectos perjudiciales en el mercado de telecomunicaciones nacional derivados de la entrada de Telefónica en Telecom Italia cuando hace unos meses decían lo contrario ha disparado las críticas en el país. Varias asociaciones, entre ellas la Asociación Argentina Televisión por Cable, han alertado del peligro de formación de un monopolio.