Los controladores amenazan con medidas de fuerza si no hay pacto con AENA
Los controladores aéreos se han levantado de la mesa de negociación del convenio colectivo y amenazan a AENA con volver a las medidas de fuerza, si en dos semanas no alcanzan un pacto. Las aerolíneas afirman que el conflicto nunca ha remitido y aportan como prueba los retrasos continuos en los principales aeropuetos.
La conflictividad vuelve a los aeropuertos, si es que algún día se recuperó la completa normalidad. El colectivo de controladores aéreos de la plantilla de AENA anunció ayer que no piensa sentarse el próximo día en la mesa de negociación de su segundo convenio colectivo, hasta que la empresa pública propietaria de la red de aeropuertos cumpla los compromisos "de mínimos" que ambas partes y el ministerio de Fomento alcanzaron el pasado 13 de agosto.
Un portavoz oficial del sindicato de controladores aseguró a este diario que USCA no volverá a la mesa de negociación si "AENA no demuestra con los hechos que está dispuesta a negociar lealmente y a cumplir lo que se pacte". Además advirtió que "en caso de que en el plazo de 15 días no hayamos avanzado de manera satisfactoria, nos plantearemos medidas de fuerza".
AENA mostró la sorpresa por el abandono de la mesa negociadora del USCA cuando "en la reunión celebrada el miércoles se intercambiaron propuestas sobre la masa salarial para este año, no dijeron nada y se quedó para continuar la próxima semana".
Las compañías aéreas, por su parte, recibieron con "honda preocupación" las noticias del recrudecimiento del conflicto entre los controladores aéreos y AENA. Fuentes de una de las principales patronales aseguraron que "en realidad nosotros no hemos notado después del verano ningún tipo de mejoría en los índices de puntualidad de los principales aeropuertos, que siguen por los suelos. Los retrasos siguen siendo la norma". Los representantes de las empresas creen que la actitud de falta de colaboración de los controladores dura más de un año.