Así lo explicó Caja Madrid en un comunicado en el que añadió que la venta "se produce por la posibilidad de obtener una rentabilidad excepcional en una inversión madura, que ha cumplido suficientemente los objetivos con los que se planteó".
Además, aseguró que la operación se enmarca dentro de la política de optimización de recursos financieros.
Caja Madrid recordó que entró en el mercado marroquí en 1989 con la adquisición de un 3% de Banco Comercial de Marruecos (BCM), que amplió al 5% en 1997.