Mitterrand condicionó el sí a la unificación alemana a la implantación del euro
El fallecido presidente francés François Mitterrand condicionó en 1989 su aprobación a la unificación alemana a que el gobierno del entonces canciller alemán Helmut Kohl facilitara el camino para la creación de una moneda única europea.
Así se desprende del protocolo, hasta ahora confidencial, de las conversaciones mantenidas entre Mitterrand y el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Hans-Dietrich Genscher, difundido ahora por el semanario Der Spiegel, en su edición de este domingo.
Según ese documento, Mitterrand lamentó ante su interlocutor que la República Federal de Alemania (RFA) estaba "frenando el camino a la unión económica y monetaria", a lo que Genscher respondió comprometiéndose a hacer concesiones en esa dirección.
El presidente francés aspiraba a un pronunciamiento comunitario en favor de la unión monetaria en la siguiente cumbre europea, en Estrasburgo (Francia)
Según recuerda Der Spiegel, los líderes europeos, reunidos en dicha ciudad francesa, marcaron efectivamente los pasos a seguir para avanzar hacia la unidad monetaria y apoyaron, asimismo, el plan para la unificación alemana del gobierno de Kohl.
El semanario apuntala estas informaciones en declaraciones que hizo a ese medio el ex asesor de Mitterrand y posteriormente ministro de Exteriores francés Hubert Védrine, según el cual el presidente no aceptaba una reunificación alemana si no iba acompañada de una integración europea, lo que para él implicaba la unidad monetaria.
"Probablemente no habría habido una unidad monetaria sin la unificación alemana", apunta por su lado el ex presidente del Bundesbank, Karl-Otto Pöhl.
Der Spiegel confronta estos testimonios con los del entonces ministro de Finanzas, Theo Waigel y el actual titular del departamento, Wolfgang Schäuble -por entonces, ministro del Interior de la RFA-, que rechazan la existencia de tal pacto.
Las informaciones avanzadas hoy por "Spiegel" se producen ante el vigésimo aniversario de la entrada en vigor del Tratado de Unidad, -el 3 de octubre de 1990-, por el que quedó formalmente disuelta la República Democrática Alemana (RDA), apenas un año después de la caída del Muro de Berlín -el 9 de noviembre de 1989-.
Kohl negoció el proceso tanto con las autoridades de la maltrecha RDA como con los líderes de las antiguas potencias aliadas vencedoras de la Segunda Guerra Mundial y sus socios europeos.