Los sindicatos quieren aislar Madrid del resto de grandes ciudades
CC OO y UGT propusieron ayer que en los servicios mínimos del transporte en la huelga del 29-S no haya trenes nacionales de largo recorrido ni vuelos internacionales y sólo uno entre Madrid y el resto de grandes aeropuertos; a cambio, admiten un 25% de trenes de cercanías y de autobuses de transporte de viajeros. Desde hoy negocian con Fomento estos servicios y prevén que la ausencia del AVE sea el mayor escollo.
Los sindicatos no han esperado esta vez a que el Gobierno haga su propuesta de servicios mínimos para el transporte para la huelga general del 29 de septiembre, como es habitual. Ayer, los responsables de Servicios al Ciudadano de CC OO y de Transportes y Comunicaciones de UGT fueron al Ministerio de Fomento para presentar su iniciativa para dichos servicios mínimos.
Fuentes de este departamento ministerial aseguraron ayer a sus responsables no les ha molestado que los sindicatos hayan tomado la iniciativa y añadieron que ya están estudiando la documentación sindical y elaborarán una contrapropuesta". A las 17.00 horas de hoy está previsto que se celebre una primera reunión para negociar estos mínimos. Los sindicatos prevén que estas reuniones se alarguen durante esta semana y se mostraron confiados en llegar a un acuerdo con Fomento -a diferencia de la anterior huelga general de 2002- porque detectaron "un clima de cierta cordialidad".
Dicho esto, los sindicatos saben que la negociación no estará exenta de conflicto. CC OO y UGT tienen claro que gran parte del éxito del 29-S dependerá de si consiguen aislar Madrid del resto de las grandes ciudades españolas impidiendo al máximo las comunicaciones entre sí. Por ello, fuentes sindicales auguraban ayer que el principal escollo de las negociaciones de mínimos será la ausencia de circulación de trenes nacionales de largo recorrido, incluidos los AVE.
Los sindicatos se escudan en que en el sector ferroviario ha adoptado como suya la orden ministerial de mínimos que dictó el ex ministro del PP, Francisco Álvarez Cascos, en la anterior huelga general del 21 de junio de 2002. "Entonces ya existía el AVE y la propuesta del Gobierno no incluía ni un solo tren nacional" aseguran fuentes sindicales.
A cambio de mantenerse férreos a la hora de impedir la circulación ferroviaria, los sindicatos podrían admitir la inclusión de algún vuelo internacional pero en ningún caso los servicios mínimos aéreos que impuso Cascos y que incluían un vuelo por trayecto de ida y vuelta a cada destino y por cada compañía. Los sindicatos recurrieron estos mínimos a los tribunales que años después les dieron la razón al considerar estos servicios "abusivos". Por su parte, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, recalcó ayer su esperanza en que se llegue a un acuerdo sobre el asunto. Estos son los principales servicios mínimos que piden CC OO y UGT:
Transporte aéreo: mantener un vuelo por trayecto de ida y vuelta entre península e islas y península-Melilla e interinsulares; un vuelo por trayecto de ida y vuelta de los programados para ese día que conecten los principales aeropuertos nacionales y cuya distancia supere los 500 km. Y se admitirán los vuelos internacionales que hayan despegado antes de las 00:00 horas del día 29.
Transporte ferroviario: ningún tren nacional de largo recorrido ni ningún tren internacional. Entre las 06:00 y las 09:00 horas el 25% de los trenes. Y si este trayecto coincide con otros medios como autobús o tren "se garantizará que éstos no circulan en ese tramo horario".
Transporte por carretera: en líneas con entre uno y cuatro viajes diarios se mantendrá un servicio; entre cinco y siete, dos servicios; y superiores a ocho trayectos diarios, tres servicios.
Transporte marítimo: se mantiene un buque por sentido y únicamente para pasajeros y sus vehículos entre las principales líneas marítimas.
Educación y sanidad, en manos regionales
El Estado de las autonomías también afecta a las huelgas. Así, ahora, el Gobierno central se limita a fijar los servicios mínimos en el transporte, el resto de mínimos, fundamentalmente en la sanidad y la educación son fijados por las autoridades autonómicas, ya que son ellas las que gestionan ambas competencias.De momento, Cataluña tiene previsto ser la primera en hacer público hoy su programa de cuantos trabajadores deberán garantizar la atención sanitaria y la asistencia a los colegios y universidades durante la jornada de huelga del próximo 29 de septiembre. Todo apunta a que el diseño catalán de servicios mínimos contará con el visto bueno de los sindicatos, con los que ha sido negociado. El resto de las regiones deberán ir cerrando sus propios servicios mínimos con o sin acuerdo sindical. De no contar con su visto bueno, las comunidades obligarán igualmente a cumplir los servicios mínimos que fijen ellas mismas.En cuanto a la propuesta sindical de servicios que deberán prestarse en materia de transportes, que empezarán a negociarse hoy con Fomento, CC OO y UGT precisan que en el transporte de viajeros por carretera, en las líneas de autobús que dependan de las comunidades "y que coincidan con otros modos de transporte, no se prestará ningún servicio".