Nuevos tiempos en la impresión
Omán Impresores se especializa en el uso de la tipografía artesanal y papeles especiales.
El mundo de las artes gráficas se debate entre luchar o morir. La irrupción del libro electrónico, la impresión digital e incluso el correo electrónico han afectado de manera determinante al trabajo de las imprentas de toda la vida.
Así, ya no es raro que muchas parejas a próximas a contraer nupcias decidan decir adiós a las invitaciones de boda de siempre acudiendo a la impresión digital, mucho más barata, o incluso al correo electrónico. Una tendencia que también ha seducido a muchas empresas españolas, que en estos momentos elaboran sus catálogos, impresos, folletos, invitaciones e incluso la propia información corporativa de la empresa a través de la impresión digital e incluso de forma online. Y más ahora, en plena crisis económica.
Pero quizá no saben lo que se pierden. Invitaciones o catálogos que despiden fragancias, con papel tipo gabardina resistente al agua, tarjetas con barniz braille, memorias con textura de madera, piedra o tela con la clásica raya diplomática, así como el papel con efecto aterciopelado o cachemir combinado con el uso de distintas técnicas de impresión son sólo algunas de las posibilidades que ofrecen diversas imprentas españolas, en este momento en pleno punto de inflexión.
¿Trauma u oportunidad? Javier Martínez Mañas, fundador y uno de los propietarios de Omán Impresores, se inclina por lo segundo. Su secreto, la innovación y la especialización. Combinar la técnica de impresión más artesanal, inventada por Gutenberg hace siete siglos (tipografía) con los últimos avances, como el offset, la impresión digital e incluso ahora el láser, que "esculpe el papel", está siendo su principal arma.
Un método de trabajo que se ha puesto de moda en Inglaterra, Estados Unidos y Francia debido a la demanda de los más vanguardistas diseñadores, y que en España, de momento, muy pocos impresores saben manejar. Tanto está siendo el auge que está cobrando la tipografía que algunas imprentas españolas están recuperando del baúl de los recuerdos las majestuosas máquinas de impresión Minerva. En Inglaterra, incluso, se han vuelto a comercializar estas máquinas y los clásicos chibaletes, que contienen los tipos móviles, asegura Martínez Mañas.
Pero todo no se reduce a tener una máquina. En esta imprenta tienen claro que saber manejar la tipografía, que suele usarse para insertar el diseño (logo), con las modernas técnicas de impresión utilizando estos papeles tan exclusivos pasa necesariamente por la especialización.
Un reto que Omán ha venido cultivando durante sus 13 años de existencia, con una apuesta clara por la innovación. Y la estrategia le ha dado resultado. Prueba de ello es que ha trabajado para diseñadores del prestigio de Alberto Corazón, o para entidades como la Biblioteca Nacional, el Instituto Europeo de Diseño, la Fundación Orange, Bankinter, Arjo Wiggins (el líder mundial en la fabricación de papel), las firmas de ropa Blanco y Fosco, y para la diseñadora Carmen March, entre otros muchos.
Centrarse en la producción de alta calidad como estrategia para encontrar un nicho de mercado distinguiéndose del resto de la competencia, a juicio de Mañas, ha sido y seguirá siendo la clave del éxito de esta pyme, que este año, pese a notar los efectos de la crisis, prevé facturar en torno al millón de euros y mantener toda la plantilla. Su próxima aventura será empezar a trabajar con la impresión láser de la mano de una empresa alemana, técnica que, de momento, nadie trabaja en España, y comenzar a introducir las tintas ecológicas.
Esculpir el papel ¿es arte o artesania?
Hace unos años era de ser muy mal impresor que se quedaran marcados los tipos (las letras) en el papel. Actualmente las cosas han cambiado. Las últimas tendencias impuestas por los diseñadores más vanguardistas priman la búsqueda del relieve, labrados, troquelados, etc., donde el uso de la tipografía de siempre, la estampación, la serigrafía o el golpe en seco, son muy efectivos. El láser es una de las últimas técnicas llegadas al sector, que Omán quiere introducir en su portafolio de servicios en breve. El efecto que se consigue -según señalan en esta imprenta "de observadores, detallistas y maniáticos", como se definen a sí mismos- es esculpir o tallar el papel, sin llegar a perforarlo.
Omán impresores
Ampliación: un millón de euros invirtió la entidad para ampliar el negocio en 2006. La adquisición de maquinaria y las nuevas instalaciones en Madrid, junto al Parque Ferial Juan Carlos I, absorbieron el grueso de la inversión.Exterior: la última apuesta del grupo Omán Impresores ha sido la puesta en marcha de una web-blog (www.omanimpresores.com), donde cuelga artículos semanales sobre el sector y desde donde intenta captar clientes también en el exterior. La inversión en el asesoramiento y comunicación ha sido de 46.000 euros.