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Pistas

Erotismo, misses y ritos frente a la crisis

García Rodero, la única española en Magnum, con dificultades para exponer

Para algunos, la cultura es lo menos necesario en tiempos de crisis. Y por ahí es donde primero recortan", se queja Cristina García Rodero, el único fotógrafo español que ha conseguido ser miembro de la prestigiosa agencia Magnum, aquella fundada por Robert Capa y Henri Cartier-Bresson tras la Segunda Guerra Mundial. Incluso para el trabajo de García Rodero la recesión pasa factura a la hora de exponer y publicar su obra. En la actualidad no encuentra editor ni promotor para su trabajo más completo, denominado Entre el cielo y la tierra, que comenzó en 1990 y que todavía está concluyendo.

Esta obra es un compendio de tomas basadas "en la dualidad del ser humano, que comprende el cuerpo y el espíritu". Representa "lo religioso y lo pagano, lo natural y lo sobrenatural, la vida y la muerte, la guerra y la paz, el hombre y la mujer", explica. Recoge imágenes de sus viajes por España, el Mediterráneo, Cuba, Haití o Venezuela.

La artista dirigió la semana pasada un curso en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander, donde atrajo a 100 profesionales y aficionados de la fotografía. A pesar de su tirón y su prestigio internacional, las instituciones son reticentes a apostar por la cultura, incluso para ella. "El Estado y las entidades privadas han tenido que recortar gastos. Si antes era difícil encontrar fondos, ahora es mucho peor".

Ahora le motivan las fiestas, como la del Orgullo Gay

España oculta

Los ritos, la religiosidad, las fiestas religiosas y paganas son temas que a Rodero le han perseguido durante toda su vida profesional. Recién licenciada en Bellas Artes, y con formación en pintura, decide probar con 23 años, en 1973, con la fotografía. "No había escuelas, sólo un curso por correspondencia. Así que salí a la calle", recuerda.

Desde un principio le interesaron las fiestas populares bajo un punto de vista antropológico, con el escritor Julio Caro Baroja y el pintor Antonio López como referencias. Se fue, durante sus vacaciones, Navidades y fines de semana hasta 1989, recorriendo los pueblos de España, pagándoselo de su propio bolsillo, buscando las fiestas más interesantes, muchas de ellas ligadas a la religiosidad que todavía quedaba en el país. De ahí salió su trabajo más conocido, España oculta, que se convirtió en ejemplo de la España católica, negra y brutal que todavía sobrevivía en el mundo rural. "No era mi intención sacar la España profunda. Se utiliza peyorativamente y me molesta. Simplemente habla de un momento de España especialmente difíciles. Era nuestra realidad".

La exposición de esta España oculta va a empezar de nuevo una gira por todo el país, ya que La Caixa patrocina una muestra itinerante que comenzará este mes en Tarragona.

En octubre, en Galicia

Otra exposición que inaugurará este año será en Santiago, en octubre, con motivo del año Xacobeo. "Voy a recopilar todo lo mejor que tengo de Galicia de los últimos 20 años", cuenta, "algunas fotos de España oculta y un 70% de trabajo desconocido hasta ahora".

Pero los intereses de Rodero no han cambiado en exceso. En los noventa comenzó a viajar a Cuba, Haití y Venezuela, buscando festividades y ritos. De allí salieron fotos muy potentes de rituales, trances y experiencias místicas, mezcla entre lo cristiano y las divinidades africanas. No ha vuelto a Haití después del terremoto de 2010, pero lo hará. Y a Cuba regresa cuando puede, para concluir un nuevo libro sobre la ciudad de Baracoa, en el 500 aniversario de su fundación.

"Me muevo a través de las emociones. Para hacer una foto tengo que emocionarme, de forma positiva o negativa, es el hilo de mi trabajo", reconoce. Lo que ahora le motiva, se confiesa, son las nuevas festividades, como el Orgullo Gay o el Burning Man, un festival mezcla de sadomasoquismo, hippismo y carnaval que se celebra en el desierto de Nevada. También quiere recorrer el mundo buscando, por ejemplo, festivales eróticos. "Me interesa un punto de vista irónico, como todos aquellos hombres que salen voluntarios en las exhibiciones porno". Desea además tomar con su cámara los concursos de misses de niñas, que se celebran en EE UU, de mujeres gordas o de transexuales. Pero sin perder de vista ritos como los de los eremitas de Medio Oriente, "con un tratamiento extremo del cuerpo y de los placeres". Eso sí, siempre con sus recursos: "Me sigo pagando los viajes de mi bolsillo".

Archivo personal para Magnum

Reconoce García Rodero (Puertollano, 1949) que nunca pensó entrar en Magnum: "No me veía con el perfil. Soy mujer, latina y haciendo trabajo sobre cultura". Pero en 2009 consiguió ser miembro.Confiará su archivo fotográfico, "mi tesoro" lo denomina, a la agencia Magnum, que trabaja en construir en Francia una fototeca para sus miembros.Su éxito comprende una mezcla "de ser machacona, reincidente", con años para acabar cada obra, y su formación artística "con un trabajo solitario e independiente".

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