Industria: contra la saturación de las redes las operadoras deben invertir
Bernardo Lorenzo, secretario de Estado de Telecomunicaciones, afirmó hoy que la mejor solución contra la saturación de las redes es invertir, aunque puntualizó que en España todavía no hay problemas de congestión.
Bernardo Lorenzo, en la clausura del XXIV Encuentro de las Telecomunicaciones organizado por la patronal AETIC y Telefónica, había señalado que tras la paralización de las inversiones en los últimos tiempos, el sector tenía que volver a la senda inversora para la creación de redes ultrarrápidas que den respuesta a las necesidades de los nuevos servicios.
En un encuentro con periodistas y preguntado por la polémica sobre las tarifas planas limitadas que contemplen el uso que los usuarios hagan de la red, dijo que en España ya existen al igual que en otros países y que no le cabe duda de que los operadores actuarán para ser competitivos en el sector y no perder clientes.
Bernardo Lorenzo que en los últimos años ha ocupado el cargo de director general de Telecomunicaciones, dijo en la clausura que el reto para España ya no está en conseguir la convergencia con Europa sino de convertirse en líder en el uso de productos y servicios Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) avanzados. Para ello, dijo, hay que fomentar la demanda y la creación de una industria de TIC propia especializada en sectores estratégicos.
El secretario de Estado repasó el esfuerzo realizado en los últimos años y explicó la segunda parte del Plan Avanza en la que se actualizan los objetivos con la estrategia de ayudar a la recuperación económica y al cambio de modelo económico del país a través de un uso intensivo y generalizado de las TIC.
De esta forma el plan se plantea conseguir una administración sin papeles para 2015, nuevas infraestructuras de telecomunicaciones, el uso y confianza en Internet y el impulso de la Industria TIC en sectores estratégicos.
En este contexto recordó el plan de reordenación del espectro radioeléctrico que se aprobará en otoño y que será vital para dotar de mayor capacidad a las redes de telefonía móvil ante el incremento del uso de datos por esta red.
Dijo que la consulta pública del plan ha recibido 30 aportaciones que, en general, reflejan bastante consenso, y que con este plan, el más ambicioso que se ha realizado, se abre "la posibilidad única" de que los operadores que no tienen red móvil accedan a ella.
En relación a las infraestructuras fijas, reiteró la necesidad de crear redes ultrarrápidas que sirvan de soporte a los nuevos servicios, tanto audiovisuales como de tres dimensiones que se están desarrollando.
Para facilitar este despliegue la Administración habilitará ayudas económicas y anunció que están trabajando en un anteproyecto de ley para transponer al derecho español las medidas regulatorias adoptadas por la UE en materia de redes de nueva generación.
Además, próximamente el Gobierno aprobará el reglamento de infraestructuras comunes de telecomunicaciones para facilitar el despliegue de fibra óptica en los edificios.
Insistió en que "no nos podemos permitir" dejar de invertir en redes de banda ancha y "no desplegar rápidamente estas infraestructuras en España".
En este encuentro de telecomunicaciones que se ha celebrado durante cuatro días, los operadores han destacado la necesidad de cambiar el modelo de negocio de las telecomunicaciones para que puedan recibir mayores ingresos de acuerdo con el incremento del tráfico de la red, por lo que se han manifestado a favor de acuerdos comerciales con los operadores de Internet y por nuevas tarifas de acuerdo con el uso.
Pero además, las operadoras han anunciado nuevos planes de inversión. Así, Orange ha señalado que invertirá en los próximos tres años 500 millones de euros en sus nuevas redes móviles y Yoigo desplegará redes de cuarta generación móvil si consiguen espectro suficiente.
Vodafone anunció su próxima entrada en servicios de televisión, mientras que en la última jornada de hoy, Guillermo Ansaldo, presidente de Telefónica de España, anunció que próximamente iniciarán la migración a la gran parte de los clientes de ADSL de 6 megabits de velocidad, a los 10 megas y sin coste adicional, de forma que los 10 megas serán la velocidad base de la operadora.