Morgan Stanley advierte que la crisis de la deuda soberana no ha concluido
Morgan Stanley resucita el fantasma de la crisis de la deuda pública. La entidad estadounidense asegura en un informe que los impagos por parte de algunos estados serán inevitables.
Los inversores tendrán que afrontar impagos en los bonos soberanos, debido al envejecimiento de la población y la dificultad de los estados de obtener más ingresos a través de impuestos, según Morgan Stanley.
"La cuestión no es si incumplirán sus promesas, sino más bien cuáles de ellas van a incumplir y qué forma adoptarán esos impagos", señala Arnaud Mares, director ejecutivo de la entidad en Londres, en un informe publicado ayer. "La crisis de deuda pública es global y no ha terminado", añade.
El directivo, no obstante, matiza que desde su punto de vista es "extremadamente improbable" que se produzca un impago absoluto en economías grandes y desarrolladas". Mares afirma también que medir la deuda como un ratio respecto al Producto Interior Bruto (PIB) es un falso marcador de la salud de las finanzas de un país, pues no refleja su liquidez disponible y no es un indicador del futuro, sino del pasado.
Los intereses de los tenedores de bonos se enfrentan a los de los ciudadanos
Falsos indicadores
Así, el ratio de deuda pública respecto al PIB de EE UU asciende al 53%, uno de los más bajos entre las naciones desarrolladas, si bien su deuda respecto a sus ingresos alcanza el 358%, uno de los ratios más elevados. En cambio, en Italia el ratio respecto al PIB es del 116% y respecto a los ingresos, del 188%.
En opinión de Mares, que ha trabajado en el Tesoro británico y ha sido vicepresidente de la agencia Moody's, un escenario de recesión en "W" no invalida la tesis de que se produzcan impagos de deuda pública. Esto provocaría todavía más daños en la capacidad recaudatoria de los gobiernos, lo que elevaría su déficit e incrementaría el riesgo de impago de los tenedores de bonos. Los intereses de estos últimos se enfrentan con los de otros sectores políticamente importantes, como el de los pensionistas, con sus reivindicaciones en materias de ingresos y salud, señala el documento.