AENA vuelve a pedir a los controladores que hagan horas extras en Madrid
AENA ha vuelto a pedir a los controladores aéreos que hagan horas extraordinarias en Madrid, solicitando voluntarios para el pasado fin de semana y para hoy lunes. Los trabajadores han expresado su "desconcierto" tras recibir la solicitud sólo unas horas después de haber ratificado el acuerdo laboral de mínimos con la empresa.
"Desconcierto". Esa es la palabra que más ha circulado este fin de semana entre los controladores aéreos. Sólo un día después de que el 90% de los trabajadores ratificaran el acuerdo de mínimos firmado entre AENA y la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), poniendo fin a seis meses de conflicto, los controladores deMadrid recibieron un mensaje de móvil solicitando voluntarios para hacer horas extraordinarias.
En concreto, AENA necesitaba cubrir los turnos de tarde de ayer domingo y de hoy en el Centro de Control Aéreo de Madrid, encargado de gestionar el tráfico aéreo que entra y sale del aeropuerto de Barajas (en la capital) y el que sobrevuela la zona centro de España; los turnos de la mañana del sábado y del domingo en la sala de control; y el turno de tarde del sábado en ruta.
El malestar de los trabajadores de este sector se enmarca en el enfrentamiento que han vivido con AENA y con elMinisterio de Fomento en el último medio año a propósito de las condiciones laborales de los controladores, en especial en lo relativo a su sueldo y a la realización de horas extraordinarias.
Dentro del colectivo, algunos trabajadores no se terminan de explicar cómo es posible que AENA esté ya reclamando que se trabajen horas extraordinarias cuando desde la empresa y desde el propio Gobierno se ha estado denunciando que éstas se hacían de manera innecesaria para poder incrementar su salario. Las horas extraordinarias son 1,75 veces más caras que las ordinarias.
Asimismo, hay controladores que creen que la solicitud de la compañía es una prueba más de que es necesario ampliar la plantilla.
Un portavoz del sindicato USCA consultado por este diario achacó la oferta de horas extras a una mala programación por parte deAENA. "Se suponen que ellos ya saben desde hace tiempo el número de pantallas que necesitan para estos días y la gente que iban a precisar", subrayó.
Desde AENA no supieron aclarar por qué ha sido necesario pedir voluntarios para cubrir los turnos de trabajo. "Ha surgido esa necesidad", manifestaron fuentes de la entidad pública.
Lo que sí quisieron dejar claro es que la medida se ajusta, de manera "escrupulosa", al acuerdo base firmado entre la empresa y el sindicato mayoritario el pasado día 13. El pacto prevé que, para atender aquellas incidencias que se produzcan 48 horas antes del inicio del servicio, se pondrá en marcha un sistema que permita cubrir las necesidades operativas con controladores que se ofrezcan de forma voluntaria. Los trabajadores no podrán hacermás de dos turnos de este tipo cada mes. Asimismo, tienen como limitación un tope de 80 horas extraordinarias a lo largo del año.
AENA tiene como objetivo mantener la masa salarial del ejercicio actual en 480 millones de euros. Los controladores han sufrido una merma en su sueldo medio de alrededor del 40% (ha pasado de 350.000 euros anuales a 200.000 euros), después de que el Gobierno, vía decreto, redujera de forma drástica las horas extraordinarias, ampliando la jornada habitual de 1.200 a 1.670 horas al año.
Expectación ante la reunión con el ministro de Fomento
La reunión que el ministro de Fomento, José Blanco, mantendrá el viernes, tras el Consejo de Ministros, con representantes de los controladores aéreos ha levantado expectativas entre los trabajadores. El encuentro se produce después de que los dirigentes del sindicato USCA solicitaran una reunión cara a cara con el ministro en uno de los momentos de máxima tensión en el proceso negociador que mantenían los trabajadores con AENA. En aquel momento, a principios de este mes, el titular de Fomento rechazó de plano la petición de los controladores, al entender que serviría para reforzar sus reivindicaciones en el conflicto abierto con la entidad pública. Blanco sólo ha accedido a recibir a los representantes sindicales cuando ya hay sobre la mesa un acuerdo de mínimos que garantiza la paz laboral. A la entrevista acudirán el presidente de USCA, Camilo Cela, el vicepresidente, José Manuel Acevedo, y el secretario general, Abel Hernández.