Los declarantes del impuesto sobre la renta caen por segunda vez en la historia
Los contribuyentes que presentaron este año la declaración del impuesto sobre la renta de 2009 ascendieron a 19,2 millones, un 1,1% menos que el ejercicio anterior. Se trata de la segunda caída en la historia reciente y la primera por causas económicas. En 1999 también se redujo el número de declarantes debido a la reforma fiscal aprobada por el Gobierno del PP.
La Agencia Tributaria esperaba recibir 19,5 millones de declaraciones de la renta este año. Sin embargo, la cifra ha sido algo menor y, en contra de las previsiones de Hacienda, el número de declarantes descendió respecto al ejercicio de 2008. Un hecho excepcional que desde 1980 -cuando se inicia la serie histórica- sólo había ocurrido una vez. Fue en 1999, cuando el PP introdujo mínimos personales y familiares en el impuesto y elevó el umbral a partir del cual es obligado presentar la declaración.
La caída del número de declarantes se debe al descenso de los salarios y al deterioro del mercado laboral -la tasa de paro alcanzó el 18% en 2009-. Si bien los beneficiarios de prestaciones por desempleo también sufren retenciones por el IRPF, al igual que el resto de contribuyentes no están obligados a presentar la declaración si sus ganancias no superan los 22.000 euros anuales cuando proceden de un único pagador o los 11.200 euros cuando existen diversas fuentes de ingresos.
En cualquier caso, la Agencia Tributaria informó que Hacienda abonó antes del 30 de julio las devoluciones al 85,1% de los contribuyentes que tenían derecho a ellas y que ascienden a 13 millones. En total, ha devuelto ya 9.000 de los 12.000 millones inicialmente previstos. En el ejercicio anterior, la Agencia Tributaria estuvo más ágil, ya que por estas mismas fechas había reembolsado 9.900 millones al 87% de los contribuyentes.
Con todo, desde la Agencia Tributaria recuerdan que el plazo legal para realizar las devoluciones termina a final de año y que se "ha cumplido el compromiso de ingresar el resultado negativo de la declaración al 85% de los contribuyentes". El hecho de que un declarante del IRPF no haya recibido aún su devolución puede deberse al azar, es decir, que su declaración haya quedado rezagada y sea de las últimas en verificarse. Aunque también es probable que el sistema informático haya notificado alguna anomalía y ello retrase la devolución.
El proceso de control del IRPF está totalmente informatizado y se realiza través del cruce de datos de diversas fuentes estadísticas, no sólo la tributaria. Ello permite comprobar, por ejemplo, que un contribuyente que reclama la deducción por vivienda tiene realmente derecho a la misma. Cuando las variables no cuadran, el proceso de devolución puede demorarse.
Hacienda envió 21,5 millones de borradores y datos fiscales, un 4,5% más que el ejercicio anterior y más incluso que el número de declarantes. Ello se debe a que las declaraciones pueden ser conjuntas y "porque tanto los borradores como los datos fiscales se pueden solicitar, aunque no exista obligación de declarar". En cualquier caso, es importante revisar siempre el borrador antes de confirmarlo, ya que existen circunstancias de los declarantes que Hacienda puede desconocer y que influyen en el resultado final de la declaración.
A pesar del envío del borrador y del programa Padre, que facilita la cumplimentación de la declaración, la dudas tributarias no menguan. Entre mayo y junio, la centralita de información y asistencia de la Agencia Tributaria recibió 100.000 llamadas diarias.
Las cifras
9.100 millones de euros ha devuelto hasta julio Hacienda, un 7,7% menos.10% es la cifra de borradores que se pierden en Correos.21,5 millones de borradores y datos fiscales se enviaron a los contribuyentes.
El descenso de ingresos recorta las devoluciones
El deterioro económico no sólo ha reducido los ingresos derivados del IRPF, sino que también ha provocado que la Agencia Tributaria reembolse menos dinero en la campaña sobre la renta. Las previsiones iniciales de Hacienda apuntaban que las devoluciones sumarían 12.280 millones, un 4,5% menos que el ejercicio anterior. Sin embargo, esa cifra puede incluso pecar de optimista y, probablemente, los ingresos efectuados por Hacienda a los contribuyentes con declaraciones negativas será menor.En principio, de media, la devolución por contribuyente se situará en torno a los 800 euros, cuando el año anterior alcanzó los 832. En cualquier caso, los datos del impuesto reflejan el difícil momento económico. En 2009, la recaudación alcanzó los 63.800 millones de euros, un 10,5% menos que el año anterior. Ello supuso un fuerte varapalo para el Gobierno, ya que el IRPF representa el principal tributo por recaudación y porque, además, el Ejecutivo presupuestó que ingresaría por el impuesto sobre la renta 13.587 millones más. Un error que equivale al 1,2% del PIB.Con todo, en el primer semestre del año, la recaudación por el IRPF empezó a ofrecer signos de recuperación. Aunque no se debe a la mejora de la situación económica, sino al incremento de impuestos. La supresión parcial de la deducción de 400 euros y el incremento de los tipos que se aplican sobre el ahorro en el IRPF permitieron que la recaudación del impuesto sobre la renta aumentara un 3,6% entre enero y junio respecto al mismo periodo de 2009. Ahora, sólo falta que la tendencia se mantenga hasta finalizar el año.