La Seda se dispara un 31% en Bolsa tras arrancar la ampliación
Las acciones de La Seda de Barcelona alcanzaron ayer el 31,2% de subida al cierre de la Bolsa. La máxima apuntaba por la mañana al 40%, poco después de que el presidente, José Luis Morlanes, presentara la ampliación de capital y la nueva estrategia de la empresa química.
En contrapartida, los derechos de suscripción preferente, que empezaron a cotizar ayer, se depreciaron un 42,9%. Con esta modalidad, los actuales accionistas podrán adquirir 67 acciones nuevas por cada 14 acciones antiguas.
El 80% de la emisión de los derechos está ya comprometida y representa 250 de los 300 millones de euros de la ampliación de capital que se inició el sábado. Los bancos acreedores han acordado capitalizar 150 millones. Caixa Geral y Liquidambar suscribirán 35 millones, y el grupo portugués BA Vidrio, con una aportación de 65 millones, se convertirá en el primer socio industrial de La Seda en 20 años.
La compañía química confía en que la operación sirva para reducir su deuda a la mitad a finales de año, pasando de los 940 millones al cierre de 2009 hasta 464 millones. El objetivo es reducir el ratio deuda/Ebitda por debajo de uno en 2015.
En última instancia, la empresa química ha puesto en circulación 3.000 millones de acciones ordinarias con un valor nominal de 10 céntimos de euro. La Seda, presente en 12 países, realizará este año una simplificación de su estructura corporativa, según indicó José Luis Morlanes al hilo de la reducción de gastos. Asimismo, abandonará la elaboración de materias primas y se centrará en los productos de valor añadido.
La previsión de crecimiento es del 4% de la demanda total del mercado en los próximos cuatro años, gracias a la merma de las importaciones por la actual cotización del dólar y el encarecimiento de los fletes. Por este motivo, La Seda anunció a finales de junio que conservaría sus plantas en Turquía, Grecia y Portugal, consiguiendo un Ebitda positivo antes de su venta. En cuanto a la gran planta de Sines (Portugal), pasa a ser un activo no estratégico.