Burberry prevé concluir su reorganización en España a mediados del próximo año

El grupo textil británico Burberry lleva meses inmerso en la reestructuración de su negocio en España para relanzar unas ventas que encadenan trimestres de caídas. Pero el popular fabricante de gabardinas ya ha puesto fecha al final de este proceso, la próxima primavera.

Tradicionalmente, Burberry comercializaba una colección diseñada específicamente para el mercado español. Sin embargo, una vez concluya la temporada otoño-inverno 2010 sólo comercializará en España los productos que la multinacional idea para el mercado global, que considera de un perfil más comercial.

Este planteamiento forma parte de la reestructuración de su modelo de negocio en el mercado español, cuya medida más significativa ha sido el cierre de su planta en Barcelona, donde Burberry tenía una plantilla cercana a los 300 trabajadores. La multinacional de los cuadros -que aún permanece al margen de los grandes grupos industriales del sector del lujo- ya adelantó en la presentación de sus últimos resultados anuales que su reconversión en España derivaría en unas pérdidas operativas durante el ejercicio 2011 de 10 millones de libras (cerca de 11,9 millones de euros) y una reducción a la mitad de la facturación en el mercado español.

A pesar de las medidas de reestructuración que ya ha puesto en marcha, las ventas del grupo en España aún no han repuntado. Durante el primer trimestre de su ejercicio fiscal (es decir, entre el 1 de abril y el 30 de junio) los ingresos de la filial se han reducido un 27%, situándose en 9 millones de libras (alrededor de 10,7 millones de euros).

Estos datos contrastan con los del conjunto de la multinacional que, durante su primer trimestre, ha mejorado un 27% sus ingresos, sitiándolos en 291 millones de libras. La consejera delegada de Burberry, Angela Ahrendts, mostró ayer su confianza en la evolución del consumo durante los próximos meses, en los que el grupo tiene elevar sus inversiones para fortalecer su imagen de marca.