El precio de alquiler de oficinas en el centro sigue cayendo
En sólo seis meses, la renta media en las zonas más céntricas de Madrid y Barcelona desciende un 9% y un 5%
Tanto en Madrid como en Barcelona "continúa el descenso generalizado de los precios en todas las zonas, siendo más acusado en el distrito de negocios", indica el informe sobre el mercado de oficinas presentado ayer por Aguirre Newman. Durante el primer semestre del año en Madrid se ha registrado una caída del 3,6% en las rentas medias con respecto al segundo semestre de 2009; en Barcelona esa caída ha sido del 4,3% en los últimos seis meses.
El descenso de los precios ha sido más acusado en las zonas donde confluyen los edificios que albergan a las grandes compañías. En Madrid el precio de alquiler de oficinas en esas zonas ha caído un 9% y en Barcelona un 5%.
"Sin embargo", señala el informe de la consultora inmobiliaria, "pese a la actual crisis se ha producido un fuerte incremento de la contratación", un 60% y un 29% en Madrid y Barcelona respectivamente. "La razón principal que explica este cambio de tendencia ha sido fundamentalmente una mayor percepción por parte de las empresas de estar más cerca del final del túnel que unido a una mayor flexibilidad por parte de los propietarios a la hora de negociar las condiciones de contratación", explica en su estudio Aguirre Newman.
En cuanto a las operaciones de inversión en este sector del mercado inmobiliario, en los primeros seis meses del año la consultora ha contabilizado operaciones por valor de 615 millones. El inversor institucional acapara en Madrid el 44% de la inversión; en opinión de los expertos de Aguirre Newman "el inversor institucional extranjero debería tener un mayor protagonismo en los próximos meses, relegando al inversor privado a un plano más secundario".
El informe también recuerda la situación de las cuatro torres construidas en Madrid sobre los antiguos terrenos de la Ciudad Deportiva. La salida al mercado de las oficinas de Torre Cristal, de Mutua Madrileña, ha provocado que los cuatro rascacielos representen el 25% del stock de oficinas en Madrid.