Medio siglo contra los sufrimientos infantiles
Tierra de Hombres trabaja para que la sociedad no olvide que la crisis golpea más fuertemente a los desfavorecidos
La Fundación Tierra de Hombres (TDH), creada en el año 1960 en Suiza por el periodista francés Edmond Kaiser, celebra en este ejercicio los 50 años de nacimiento de este movimiento solidario. El objetivo de la fundación es promover, mediante la acción, el desarrollo de la infancia más desfavorecida mediante la defensa de sus derechos.
A partir de ahí, empezaron a crearse diferentes organizaciones de TDH en otros países de Europa hasta llegar a España en el año 1994. En estos momento, el movimiento solidario interviene en el mundo en 900 proyectos en 65 países, centrado en tres áreas de actuación, como son salud materno infantil, protección de la infancia y derechos del niño.
Manuel Macía, director de proyectos de Fundación Tierra de Hombres-España, expone la necesidad de crear una conciencia crítica entre la población juvenil. "Nosotros trabajamos en temas de educación con escolares y universitarios para que los jóvenes se conviertan en los promotores de los derechos de la infancia en asuntos como la trata de niños, por ejemplo, en tráfico de órganos, tráfico sexual o explotación laboral".
Macía se muestra satisfecho del resultado conseguido en estos cincuenta años. "Hay cosas que van mejor, ya que hemos conseguido hitos en lo referente a la promoción de la justicia juvenil distributiva", afirma. Burundi, Nicaragua, Mauritania o Perú son algunos de los países en donde se interviene.
Pero la crisis actual preocupa a Macía. "Estamos sufriendo recortes en la financiación pública. Esto nos está obligando a diversificar las fuentes de financiación, ya que este año y el próximo habrá más recortes". El director de proyectos reconoce que son momentos difíciles. "No tenemos elevados recursos propios y reservas, ya que reinvertimos todo en los fines sociales de la fundación".
Uno de los programas de Tierra de Hombres de mayor repercusión es el de desarrollo de atenciones médicas especializadas, con el que consiguen intervenir a más de 100.000 niños en sus países de origen y si no puede hacerse allí, se les conduce a otros países. De esta forma, en España se tratan a 30 o 40 niños al año y, una vez intervenidos, vuelven a sus naciones. "Movilizamos a mucha gente, tenemos convenios con hospitales y voluntarios jóvenes acuden a los centros para que no estén solos".
En el contexto actual, Macía quiere resaltar que si los países occidentales están en crisis, "las naciones donde intervenimos, también, y eso hay que explicarlo. Los derechos universales del niño no pueden estar sujetos a la crisis".
Un sinfín de actividades
Estos cincuenta años de la fundación han sido aprovechados en España para realizar numerosos actos a lo largo de estos últimos meses. Una de las notas distintivas de las actividades tiene que ver con la participación de rostros populares surgidos del mundo de la música o de la televisión.Manuel Macía aclara que la participación de la gente conocida tiene que ver con el entorno mediático en el que vivimos. "Es preciso llegar a la sociedad y a los medios de comunicación para dar a conocer nuestro trabajo". Conciertos de Bill Wyman, ex componente de los Rolling Stones, y del intérprete de blues John Mayall o intervenciones de los españoles David Santisteban o Carolina Cerezuela son una prueba.A su juicio, las ONG tienen ante sí un nuevo reto, consistente en buscar la transparencia y la buena gestión del dinero privado y público que se ha donado. "Existen muchas ONG en España y es preciso un control interno. Es un asunto pendiente sobre el que hay que seguir trabajando".