La CE aprueba la reestructuración de Caja Castilla La Mancha
La Comisión Europea concluyó ayer el primer expediente de reestructuración de una entidad española, al aprobar las ayudas de estado concedidas para el desmantelamiento de Caja Castilla La Mancha (CCM).
La singularidad del caso español, después de tres años de crisis, contrasta con la miríada de ayudas concedidas en otros países, en particular Alemania, donde Bruselas sigue investigando el apoyo público a una gran parte de la banca.
En el caso de CCM, el departamento comunitario de Competencia, dirigido por el comisario Joaquín Almunia, ha concluido que la venta del negocio bancario de la entidad manchega Banco Liberta (filial del grupo Cajastur) garantiza la viabilidad de esos activos sin necesidad de nuevas ayudas públicas.
Bruselas considera muy positivo que esa venta se realizara a través de una subasta, porque ese método redujo la distorsión a la competencia causada por el considerable volumen de las ayudas concedidas a CCM.
En total, según la CE, las medidas de apoyo a la desaparecida entidad superaron los 7.000 millones de euros (la mayor parte en avales) para una caja cuyo balance en 2009 era de 27.000 millones.
Las ayudas consistieron en una inyección de capital de 1.300 millones y una aportación de liquidez de 350 millones a cargo del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD); una garantía para activos tóxicos de 2.500 millones, y una garantía del Estado de 3.000 millones.
La distorsión competitiva, según la CE, también se ha aminorado porque la venta de los activos no bancarios de CCM durante los próximos siete años se destinará a reembolsar al Fondo de las Cajas de Ahorros u inyección de capital y su aportación de liquidez.
Más avales públicos, pero más caros
La CE también prolongó ayer hasta finales de año el sistema de garantías públicas que el Estado español ofrece a las entidades financieras desde noviembre de 2008. Bruselas ha impuesto, sin embargo, un encarecimiento mínimo de las primas pagadas por esas garantías de entre 0,20% y 0,40% en función del rating de los bancos o cajas beneficiarios.De julio de 2009 a marzo de 2010, según la CE, la banca española emitió bonos con aval público por valor de 12.000 millones de euros, frente los más de 30.000 millones de la banca británica y los 75.000 de la alemana.