Uno de cada seis europeos tiene problemas para pagar sus facturas
Uno de cada seis ciudadanos de la Unión Europea no pudo hacer frente a pagos ordinarios (facturas, comida o productos de consumo básico) al menos en una ocasión durante los últimos 12 meses, según el Eurobarómetro presentado ayer por la Comisión Europea. En todo caso, el porcentaje del 17% es una décima menor que el registrado en la anterior edición del estudio (marzo de este año) y dos que en la de diciembre del año pasado.
El estudio recoge que una proporción similar (el 20%) tiene actualmente algún tipo de dificultad para pagar sus facturas, algo que supone una "lucha constante" para el 15%. El porcentaje de quienes declaran tener dificultades para afrontar pagos aumenta en los países del sur y del este de Europa, llegando el porcentaje hasta el 58% en el caso de Grecia.
Expectativas a la baja
En cuanto a las expectativas de futuro, el Eurobarómetro recoge un notable deterioro: así, un 28% de los europeos espera que su propia situación económica empeore el próximo año (en diciembre eran el 22%), mientras que sólo el 17% apuesta por una mejora (21% hace seis meses). El porcentaje de pesimistas aumenta hasta el 37% en el caso de España, donde también es algo más elevado (20%) el de optimistas (el 41% no espera cambios en su situación económica).
La encuesta publicada ayer muestra una estabilidad sobre la percepción de los ciudadanos en cuanto a sus posibilidades laborales. Un 18% de los encuestados confían poco o nada en mantener su puesto de trabajo dentro de un año, mientras que casi la mitad (49%) considera bastante o muy difícil encontrar un nuevo empleo en los siguientes seis meses, en el caso de que fueran despedidos por sus empresas actuales.
La pobreza crece más en España
Según la encuesta, los europeos también observan un sustancial empobrecimiento de sus países. Así, un 24% cree que en los últimos 12 meses el nivel de pobreza se ha elevado en gran medida, mientras otro 36% considera que ha crecido moderadamente. En cambio, sólo un 10% observó alguna reducción de la misma en su entorno.En el caso particular de España, el porcentaje de los que observaron un fuerte incremento de la situación de necesidad es nueve puntos superior a la media europea, mientras que los optimistas apenas representan un 7% del total.