Trabajo espera acordar la reforma de las pensiones "en tres meses"
El ministro de Trabajo compareció ayer ante el Pacto de Toledo para defender que el poder adquisitivo ganado por los jubilados durante el mandato de Zapatero justifica el sacrificio de congelar las pensiones en 2011. Esta medida fue rechazada por todos los grupos políticos de la oposición, que consideran que rompe el consenso en esta materia, dificultando que haya pacto en la reforma de pensiones, que Corbacho espera tener lista "en tres meses".
Uno tras otro, los portavoces de todos los grupos políticos -a excepción del PSOE- increparon ayer al ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, al que acusaron de haber roto el consenso generado durante años en el Pacto de Toledo al congelar las pensiones para el año 2011 como parte del plan de reducción del déficit. Una medida que, insistieron desde cada esquina del espectro político, dificultará sellar un pacto en la gran reforma estructural pendiente, la de las pensiones.
Corbacho manifestó ayer a la prensa, tras comparecer ante dicha sala en el Congreso de los Diputados, que aunque la fecha dependerá de la comisión del Pacto de Toledo, "lo razonable sería que en dos o tres meses" se hayan consensuado las conclusiones del grupo sobre cuál ha de ser la reforma.
El responsable de Trabajo agregó que entiende que su propuesta será modificada en el debate, pero advirtió que los cambios que introduzca el Pacto de Toledo "no deben desnaturalizar de una manera muy potente el documento" del Ejecutivo. La propuesta estrella de éste, que fue presentada a comienzos de año, consiste en incrementar la edad legal de jubilación de los 65 a los 67 años de forma progresiva. Una iniciativa que ayer no parecía contentar a ninguno de los grupos.
Corbacho aceptaría cambios limitados de su propuesta
Corbacho agregó que la prioridad para su Ministerio es sacar adelante la medida "por acuerdo". No descartó, sin embargo, que en el ámbito de las pensiones termine repitiéndose la jugada unilateral que finalmente se ha llevado a cabo con la reforma laboral.
"Sería un ejercicio de autismo político esperar que la no revalorización de las pensiones para 2011 no tenga un efecto sobre el consenso en el Pacto de Toledo", le espetó el portavoz del PP, Tomás Burgos. "No tienen autoridad para firmar un acuerdo. Acaban de incumplir uno", añadió, el responsable popular. En su opinión, el Gobierno intenta vender como negociación una nueva reforma, la de las pensiones, que ya tiene decidida de antemano.
"¿Por qué recortar a los pensionistas?", le inquirió a su vez el diputado del PNV, Emilio Olabarría, resumiendo las mismas críticas que también llegaron desde CiU, BNG, UPyD, ERC e IU. "Las pensiones no son suyas. æscaron;nicamente se les ha cedido su gestión", concluyó el vasco. "Es un día triste para esta comisión. Se rebajaron las pensiones y ahora rebajan el despido", ilustró el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, haciéndose eco de las reprimendas que le llovieron también a Corbacho por la reforma laboral.
Es difícil recordar otra sesión del Pacto de Toledo con un consenso tan amplio entre grupos políticos tan distanciados. Sus esfuerzos estuvieron apabullantemente centrados en castigar la gestión del ministro de Trabajo y las políticas del Gobierno en esta materia. Varios de los interlocutores continuaron sus ataques contra Corbacho manifestando que la de ayer fue "quizás su última comparecencia" ante la comisión, dadas las recurrentes quinielas que auguran su salida en una crisis de Gobierno.
Compensar las pérdidas
Corbacho, por su parte, centró su discurso y la réplica al resto de parlamentarios en defender las decisiones tomadas por el Ejecutivo. En concreto, trató de justificar -ante la incredulidad de su auditorio- que el poder adquisitivo ganado por los pensionistas durante todo el mandato del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, justifica que ahora se les pida un sacrificio por el bien común. "El PSOE ha elevado las pensiones un 34% por encima del incremento del IPC en los últimos seis años" frente a "la propina, del 3,1% que las elevó el PP en ocho años", defendió.
Bajo su punto de vista, además, dado que en 2009 los pensionistas recibieron un incremento del 2%, que era el IPC previsto, y que luego la inflación real fue del 0,3%, el colectivo ganó un 1,7% adicional de poder adquisitivo al cierre de ejercicio. "No me pidan cuentas si el IPC de 2011 es inferior al 1,7%", finalizó.
En cualquier caso, el ministro de Trabajo se comprometió a resarcirles en un futuro hipotético. Cuando regrese "el crecimiento económico", y siempre y cuando "el PSOE siga manteniendo responsabilidad de Gobierno", su grupo adoptará "las medidas necesarias" para compensar a los pensionistas por la congelación de sus rentas durante el ejercicio 2011.
Seguridad Social
Superávit, 12% menos. Por primera vez en cuatro meses, las cuentas de la Seguridad Social experimentaron un aumento (del 30%) en mayo hasta alcanzar un superávit de 9.378 millones. Sin embargo el excedente de enero a mayo es un 12,9% menor que en el mismo periodo de 2009. Los gastos crecen al 3,89%, frente a una subida de ingresos del 0,32%.