Zapatero logra convalidar la reforma laboral con el único voto favorable del PSOE
La abstención de la mayor parte del arco parlamentario (PP, CiU, PNV y el diputado socialista Antonio Gutiérrez) le salvó ayer la cara al Gobierno en la convalidación del real decreto que incorpora la reforma laboral. Sólo el PSOE votó a favor del mismo, aunque la foto definitiva se obtendrá cuando se apruebe como proyecto de ley en las próximas semanas.
La intervención más esperada fue la del Grupo Popular, a cargo de su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría. Sus objeciones a la reforma laboral defendida por el Gobierno fueron claras: "No está planteada para contratar, sino para despedir, no aborda la adecuación de la negociación colectiva a las necesidades de las empresas, elude la reforma de la formación profesional, crea más confusión y va a ser un semillero de controversias".
Durante años, el PSOE ha acusado al PP de apadrinar el abaratamiento del despido. Ahora los papeles se han dado la vuelta. El PP no sólo echa en cara al Ejecutivo que abarate el despido sino que en esta denuncia está acompañado de la mayoría de los grupos del arco parlamentario.
Sólo CiU evitó ayer criticar al Gobierno por el fondo de la reforma, ya que su propósito es endurecerla en el trámite de enmiendas. En el PSOE, la procesión va por dentro.