El Gobierno baraja eliminar el límite a la deuda local en obras conjuntas con la UE

El secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, afirmó ayer que el Gobierno buscará "mecanismos para solucionar los problemas" que puedan surgir en los ayuntamientos en 2011 por la prohibición de endeudarse a corto y largo plazo incluida en el decreto-ley para la reducción del déficit. "El decreto conlleva casuísticas que se van a analizar. Vamos a estudiar con mucho sosiego los casos singulares que se den en cada municipio para evitar problemas más importantes de los que pueda suponer la deuda", declaró Zarrías tras reunirse con Manuel Bustos, presidente de la Federación Catalana de Municipios.

El propio Bustos fue el que ofreció posteriormente algunas pistas de las salvedades que se pueden establecer en la prohibición al endeudamiento, al apuntar a los proyectos plurianuales cofinanciados con la UE. "Hay muchas inversiones municipales, de más de un año de duración, cuya ejecución está ya en marcha y están cofinanciadas por fondos de cohesión europeos. Ese dinero se puede perder si se paralizan las obras", subrayó Bustos, quién resaltó el contrasentido que supondría perder esos fondos y tener que pedir más dinero prestado para pagar esas infraestructuras. Pese a ello se mostró convencido de que "se llegará a acuerdos y se encontrarán soluciones antes del 1 de enero del próximo año".

Ese decreto fue objeto de una fuerte polémica, ya que el Ejecutivo tuvo que rectificar la primera versión (que establecía la prohibición de endeudarse en 2010 y 2011) ante la presión ejercida por la Federación Española de Municipios y Provincias. Sólo en 2010, los municipios tienen comprometidos créditos a corto plazo por 2.400 millones. El volumen de deuda a largo plazo es mucho más elevado y se situó en 29.762 millones a finales de 2009.