La Eurostat podrá inspeccionar las cuentas públicas en todos los niveles de gobierno
La oficina de estadística comunitaria, Eurostat, podrá realizar inspecciones sobre el terreno para examinar las cuentas públicas a todos los niveles de gobierno (nacional, regional y local), en los países sospechosos de manipular sus datos, con objeto de evitar la repetición de escándalos como el de las estadísticas falsas enviadas por Grecia.
Los ministros de Economía y Finanzas de la UE tienen previsto llegar el martes a un acuerdo preliminar -pendiente sólo del dictamen del Parlamento Europeo- sobre una modificación legal que refuerza los poderes de inspección de Eurostat en el marco del procedimiento contra los déficit excesivos en los estados miembros.
El reglamento revisado afirma que Eurostat "tendrá derecho a acceder a las cuentas de todas las entidades públicas al nivel central, estatal y local, así como a nivel de la seguridad social, y se le facilitará la información contable y presupuestaria detallada en que se basan".
El documento enumera los supuestos en los que funcionarios de Eurostat, acompañados eventualmente de expertos en contabilidad nacional de otros estados, podrán llevar a cabo "visitas metodológicas" en un estado miembro con el fin de comprobar sus cuentas públicas.
El reglamento considera que existen claramente riesgos significativos o problemas con respecto a la calidad de los datos estadísticos cuando, por ejemplo, "haya revisiones frecuentes e importantes del déficit o la deuda" por parte de las autoridades nacionales, "sin una explicación clara y adecuada".
También, cuando un país no "esté enviando a la Comisión toda la información estadística solicitada" en el marco del procedimiento por déficit excesivo; cuando un gobierno cambie unilateralmente y "sin una explicación clara" los métodos de cálculo; "cuando existan problemas metodológicos pendientes que puedan tener un efecto significativo" sobre los datos, o cuando haya "ajustes inusualmente elevados" en las cifras.
Sin embargo, el documento recuerda que, en primer lugar, es obligación de los estados miembros el proveer de información exacta a la Comisión Europea sobre el estado de sus cuentas públicas.
La Comisión Europea (CE) formalizó el 15 de febrero pasado su petición de ampliar los poderes a Eurostat, tras la publicación de un informe en el que el Ejecutivo comunitario acusaba a Grecia de haber enviado datos falsos sobre su déficit de manera reiterada, lo que acentuó la crisis de credibilidad de la economía helena, cerró la refinanciación de su deuda en los mercados y acabó por desestabilizar a toda la zona euro.
La propuesta de dotar de una auténtica capacidad de comprobación al organismo estadístico europeo, que también cuenta con el apoyo del Banco Central Europeo, fue lanzada hace años por el entonces comisario de Asuntos Económicos y Monetarios y ahora titular de Competencia, Joaquín Almunia, quien ha asegurado que el caso griego podía haberse evitado si los Veintisiete hubieran respaldado entonces sus peticiones en este sentido.
Una vez que los ministros de Economía de la UE adopten el texto el próximo martes, la aprobación definitiva quedará pendiente de que el Parlamento Europeo adopte su dictamen, lo que ocurrirá probablemente en la sesión plenaria del 5 de julio.